La familia eléctrica de Volkswagen tiene un tercer miembro: el Volkswagen I.D. Crozz, un crossover -todoterreno- con una carrocería deportiva de estilo cupé, propulsión cien por cien eléctrica y, en una fase posterior, también funciones de conducción totalmente autónoma. El Crozz se lanzará en 2020.
La plataforma sobre la que se levanta el Crozz, es la que la marca alemana ha desarrollado específicamente para sus coches eléctricos y que denomina MEB.
El Crozz será el más capaz de todos los presentados hasta ahora. Sus dos motores eléctricos rinden 225 kW (150 el del eje trasero y 75 el del delantero), es decir, 306 caballos, que le permiten alcanzar los 180 km/h de velocidad.
Uno de sus puntos fuertes, es la autonomía de 500 kilómetros por cada recarga. Según Volkswagen, podemos recuperar el 80 por ciento de la energía en apenas 30 minutos, siempre que encontremos un puesto de recarga rápida.
El Crozz incluirá, en una evolución posterior, funciones de conducción autónoma. El volante sería rebatible y el auto se guiaría por sí solo.
En esa situación los faros delanteros servirían como forma de comunicación con el resto de agentes de la conducción (peatones y otros vehículos). Además, el Crozz contará también con un control gestual avanzado (que permite, por ejemplo, abrir o cerrar el techo solar o activar la luz ambiental en el techo simplemente con un movimiento de la mano), un parabrisas con realidad aumentada donde se proyectará la información más relevante o un nuevo sistema de climatización CleanAir que aísla el habitáculo de la polución exterior. (Fuente: El Mundo Motor).