La estrella de la 64ª edición del Salón del Automóvil de Fráncfort de 2011 fue este pequeño modelo popular (pero con mucha tecnología), que llegará a la Argentina en 2014. Muchos saben ya que Volkswagen significa “auto del pueblo” (de la raíz Volk, que en alemán se pronuncia “folk”, y que significa “pueblo”, también deriva nuestra palabra “folclore”; Wagen, por supuesto, significa “auto”).

Sin embargo, ese mítico Volkswagen que se popularizó con el mote de Escarabajo, en estos tiempos se reencarnó en un lujoso auto de estilo retro, que para el pueblo, digamos, dejó de ser (la nueva edición del Beetle llegará al país y costará alrededor de 30 mil dólares).

Pero como la marca alemana quiere ser en 2018 número uno en producción y ventas a nivel mundial, necesita retomar ese concepto de auto masivo, y por eso lanza globalmente este nuevo up! El up! ya venía mostrándose desde hace dos ediciones del salón de Fráncfort, pero esta es la versión definitiva, tal como salió a la venta en casi toda Europa. 

Es un auto chico, por supuesto, pero destinado a ser un gran auto. Con un interior cómodo para cuatro pasajeros y tecnología de última generación. Mide apenas 3,54 metros de largo, pero tiene una distancia entre ejes muy generosa para un vehículo de este tamaño (2,42 m), y por eso el interior es bastante amplio.

Según publicó oportunamente Clarín, también el espacio de carga es razonable, con un baúl de 251 dm3 y con la posibilidad de volcar los asientos traseros hacia adelante para aumentar ese volumen. Y algo muy importante: por pedido de los mercados extra europeos, llegará con una rueda de auxilio convencional, a diferencia del prototipo que contemplaba usar run flat (neumáticos anti pinchaduras), sin auxilio.

Será, como se dijo, un auto popular, pero traerá tecnologías inéditas para esta categoría, como el frenado automático de urgencia ante la detección de un obstáculo, o el sistema start-stop, que detiene el motor cuando, por ejemplo, paramos en un semáforo, y lo vuelve a encender automáticamente cuando pisamos el embrague para poner nuevamente primera.

Esto ayuda a ahorrar combustible y a contaminar menos, lo cual parece una obsesión de este auto, que en su versión de 60 caballos consume, en promedio, 4,2 litros cada 100 kilómetros. La versión de 75 CV, consume sólo un poquito más: 4,3 litros cada 100. El motor es el mismo, con diferentes calibraciones, y tiene tres cilindros y 1.0 litro de cilindrada.

En la Argentina se estima que reemplazará al actual Gol Power, pero eso es hacer futurología, porque no puede predecirse, luego de una fabricación en Brasil para abastecer a toda nuestra región.