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Una multitud fue al acto de asunción de Obama

WASHINGTON, 22 (AFP-NA). - El 44º presidente

estadounidense, Barack Obama, juró públicamente para su segundo y

último mandato ante centenares de miles de personas al pie del

Capitolio, con un renovado llamamiento a la unión ante los

desafíos que enfrenta su país. 

En una mañana fría y ligeramente nublada, el primer presidente

negro de la Historia de Estados Unidos renovó su cargo como manda

la tradición ante el pueblo, un día después de haber sido

investido oficialmente, como dicta la Constitución.


Para enfrentar los obstáculos económicos, para resolver el

desafío educativo, para solucionar problemas como la inmigración

ilegal o el cambio climático, "ahora más que nunca debemos hacer

estas cosas juntos, como una sola nación y un solo pueblo", dijo.


Fue un discurso notablemente más corto que hace cuatro años,

frente a una situación política más complicada, con el Congreso en

manos parcialmente de la oposición republicana.

La muerte de rehenes, entre los cuales había estadounidenses,

tras un secuestro en una planta de gas en Argelia la semana pasada

nubló también la atención del inicio de este segundo mandato del

demócrata.


Obama aprovechó la oportunidad para delinear algunas de las

prioridades de su segundo gobierno en el plano internacional y

doméstico.

"Estados Unidos seguirá siendo un faro de alianzas fuertes en

todos los rincones del mundo", prometió.

También aseguró que la batalla frente al cambio climático será

uno de los puntos de preocupación centrales de su gestión.

"Responderemos a la amenaza del cambio climático, conscientes

de que que si no lo hacemos, estaremos traicionando a nuestros

niños y a las futuras generaciones", dijo Obama en su discurso

inaugural.


El presidente también llamó a sus compratriotas a dar "una

mejor bienvenida" a los inmigrantes, delineando la que podría ser

una batalla por una reforma migratoria integral que satisfaga a

uno de sus principales sectores de votantes: los hispanos.


Obama había prestado juramento el domingo en una ceremonia

privada en la Casa Blanca.

La Carta Suprema estadounidense establece que el mandato

presidencial empieza al mediodía del 20 de enero tras las elecciones.

Cada vez que ese día cae en domingo, el juramento se hace al

día siguiente a los pies del Capitolio, la sede del Congreso.


Es la séptima vez que el presidente estadounidense jura su

cargo un 21 de enero.

Frente a la larga explanada conocida como el "Mall", una

multitud de unos 800.000 personas agitaban banderas y mostraban

pancartas celebrando "4 more years", cuatro años más de

presidencia demócrata.

La asistencia es considerablemente inferior al 1,8 millón de 2009, pero el ambiente es igual de entusiasta.


Entre los presentes se hallaban los expresidentes Bill Clinton

(1993-2001) y Jimmy Carter (1977-1981), celebridades como Eva

Longoria y Beyoncé, ministros y legisladores.

El vicepresidente Joe Biden juró también su cargo por segunda

vez ante la juez hispana de la Corte Suprema Sonia Sotomayor.


Michelle Obama lucía un abrigo estampado de tono gris azulado,

mientras que las hijas Sasha y Malia lucían sendos vestidos de

tonos violetas. La ceremonia tuvo lugar en medio de fuertes medidas de

seguridad, con bloques de cemento, vehículos militares con los

colores de camuflaje, francotiradores en los tejados de los edificios.


Obama y su esposa Michelle almorzaron en el Capitolio tras la

ceremonia, con centenares de invitados, para dirigirse luego a la

avenida Pensilvania y encabezar un desfile hasta el número 1600,

la dirección de la Casa Blanca.

Ahí, en un nuevo estrado construido como es tradicional ante la

entrada norte de la mansión, presenciaron el paso de las bandas

militares y de escuelas de todo el país.

La jornada se cerraba con dos bailes de investidura, animados

entre otros por Katy Perry, Stevie Wonder y el grupo mexicano Maná. 

Autor: Redacción

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