CARACAS, 20 (AFP-NA). - Una joven herida de bala murió
este miércoles en Venezuela elevando a cuatro los fallecidos en
dos semanas de protestas opositoras, uno de cuyos impulsores
declarará ante una juez en una cárcel militar de las afueras de
Caracas.
Génesis Carmona, de 21 años y Miss Turismo del estado Carabobo
(norte), fue herida de bala en la cabeza en refriegas que
estallaron el martes con grupos desconocidos durante una marcha en
la ciudad de Valencia (norte) y falleció este miércoles sobre el
mediodía, indicó una fuente hospitalaria.
La noticia se conoció mientras un centenar de opositores y
universitarios manifestaban su apoyo, al exterior de un tribunal
de Caracas, a Leopoldo López, uno de los líderes del ala radical
de la coalición antichavista Mesa de Unidad Democrática (MUD)y
principal promotor de las protestas.
López declarará este miércoles ante una juez "en la cárcel
militar de Ramo Verde", informó su partido, Voluntad Popular, lo
que fue considerado por sus abogados como algo "no legal" en vista
de que se esperaba su traslado a un tribunal civil.
López, a quien el gobierno tilda de ultraderechista, irrumpió
este martes en un mitin opositor convocado por él mismo y se
entregó a la policía, que lo buscaba por cargos de homicidio
durante los desmanes en las manifestaciones estudiantiles, que han
dejado además de cuatro muertos decenas de heridos en todo el país.
El dirigente, un economista educado en Harvard y con una
dilatada carrera política, recibió el apoyo de la MUD, en especial
de los partidos que secundan su táctica de protestas en la calle
bajo el lema "La salida" contra el gobierno del presidente Nicolás
Maduro.
López fue trasladado a Ramo Verde la noche del martes y la
fiscalía general ha señalado que habrá que "esperar la culminación
de la audiencia para saber dónde será recluido, si es que queda
recluido".
Para el politólogo Angel Oropeza, la detención de López pone en
una situación complicada al gobierno, pues "deberá medir muy bien
sus consecuencias políticas".
"Posiblemente lo tendrán retenido algunos días. Si lo liberan
ya, sería un signo de debilidad, pero si lo retienen mucho tiempo
podrían estimular aún más las protestas opositoras y tendrían
mucha más presión internacional", explica este profesor de
Ciencias Políticas de la Universidad Simón Bolívar (USB).
Según él, lo único positivo que ha conseguido el gobierno con
la detención es "salir del sofocón de tener que dar respuestas por
la crisis económica que vive el país y trasladar el debate a un
terreno donde siempre se ha manejado mejor, el de la confrontación
política".
VIOLENCIA
El martes Caracas fue escenario de sendas marchas opositora y
oficialista, desarrolladas sin incidentes, que marcaron un clímax
luego de dos semanas de protestas universitarias iniciadas en San
Cristóbal (frontera con Colombia) en reclamo por la inseguridad y
que fueron creciendo en magnitud, extendiéndose a todo el país e
incorporando reclamos por la inflación, desabastecimiento y
detenciones de estudiantes.
Ambos bandos se habían reprochado la temeridad de convocar a
marchas que podían toparse en un país altamente polarizado y que
tiene todavía presente los hechos de abril de 2002, cuando una
manifestación opositora hacia el palacio presidencial derivó en un
sangriento golpe de estado que derrocó brevemente al entonces
presidente Hugo Chávez.
Pero por la noche y hasta bien avanzada la madrugada del
miércoles distintos puntos de Caracas y del interior fueron
escenario de pequeños focos de desmanes intermitentes, con quemas
de basura y cortes de avenidas, además de cacerolazos, reportaron
redes sociales y medios de prensa regionales y nacionales.