Sociales

Una dolorosa partida en el mundo de las letras

El más sentido pésame a la familia de Margarita Beceyro Oliva que partió hacia su destino de infinitud... Pero aquí, en la dimensión terrenal nos queda su excelsa obra poética y su recuerdo memorable como fundadora de “Escritores Rafaelinos Agrupados” y la intensa actividad que desplegó en la legendaria sociedad literaria, señera en nuestra ciudad. Para recordarla, nada mejor que publicar uno de su último poemario:


“POENIMIOS” , de Margarita Beceyro Oliva


Sala de espera

Nadie comprende,

nadie escucha.

Con la sola voz aterida

uno sigue aguardando.


El reclamo

Al paso del ómnibus,

desnudo,

en una esquina el hombre

levanta su mano.

Negaciones

No es necesario

que te conduelas.

El poema conmociona.

No explica, arrasa.


Ella

Agnóstica y panteísta,

desierta y floreciente,

desorbitada y calma,

doliente y gozosa,

cuál es

la que me usurpa,

me trasciende,

me desdobla,

me transcurre.


Condena

Nos buscan,

nos espían,

nos increpan.

Estamos obligados

a vivir huyendo.


Inutilidad

El poema se escribe

se escribirá

en el pasado.

Pero ya no habrá tiempo.


Situación

La tierra tiembla,

se estremece.

Qué hacemos parados

o suspendidos

en este planeta cruel

y subyugante.


En la pérgola

Esperar el paso de la luz,

el canto en la lejanía,

la vibración oculta.

Surcar

el tiempo suspendido,

la travesía,

el destierro.


Desasosiego

Antes de caer,

azotado por la lluvia,

el hombre vociferó:

¡soy dios!


Insomnio

En la noche sin sueño

la tensión del poema

crece.

Sólo la palabra sin tregua

puede cubrir piadosa

ese silencio

que orilla

lo absoluto.


La seducción de lo imposible

Perfume irreal,

desazón sin causa,

deseo impreciso,

ansiedad por lo que no será

ya nunca.


Devenir

Qué hago

en este lugar

de calmo desorden.

Qué viento

me devuelve

a una isla

incesante.

Una copa ha caído

y la rajadura brilla

en el pergamino

del silencio.


Belleza

Perseguirla inútilmente,

tan huidiza como el tiempo,

amante y desdeñosa.

Esplendor en fuga,

palabra que duele,

sencilla flor

al borde de un camino.


Espejismos

No es necesario que seas,

yo te construyo

y te dejo caer

en el desierto de los días.


Peregrina

Indagar

sombras huidizas

en las siestas del verano ardiente

por el aire libre.


Retrato

En este escenario

de fugaz eternidad

soy una fotocopia

de mí misma,

un sin porqué,

una obstinación

acuartelada.


Tarea

En la todavía noche

seguiré reescribiendo

un poema inconcluso

manchado con gotas de vino,

de sangre.




Adiós, amiga enamorada de las letras, Margarita Beceyro Oliva... siempre permanecerás en nuestro corazón y en tus libros como pionera de la literatura rafaelina

 Liana Friedrich Escritora



Autor: REDACCION

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