Ante autoridad de la Subcomisaría 1ª, sita en el barrio Monseñor Zazpe, se presentó un hombre de 63 años de edad, domiciliado en la calle Zaffetti al 1100, y denunció un suceso del que había resultado víctima.
Dijo el vecino que aproximadamente a la hora 4, cuando se hallaba durmiendo escuchó un fuerte ruido proveniente de la puerta de la vivienda, y que cuando la abrió observó que había recibido el impacto de un ladrillazo.
Y agregó que dicho elemento había sido traído desde otro lugar, ya que ese tipo de ladrillo no se encuentra en la calle.