Automotores

Un glamour con estilo francés.

DS 3 SO CHIC CABRIO. Luce por la agilidad y el bajo consumo que ofrece el premiado motor Pure Tech tricilíndrico turbo, a lo que suma un carácter deportivo y urbano.

El DS 3 lleva recorrido un largo camino. Primero como Citroën DS3, tal como se lanzó en 2009 y luego, con facelift incluido, desde que, en 2014, DS pasó a ser la tercera marca, independiente y con los modelos más exclusivos, del Grupo PSA Peugeot Citroën.

Súper compacto y deportivo, el diseño exterior del DS3 ya es un ícono de la flamante marca. Aquí en la Argentina, en septiembre del año pasado se relanzó toda la gama DS con distintas versiones.

Ahora nos ocupa el modelo menos potente en los papeles, pero muy atractivo, funcional y eficiente en la práctica, el DS3 So Chic Cabrio. ¿Por qué estos adjetivos? Es atractivo y funcional porque el diseño exterior (con sus dos grandes puertas, el nuevo frontal con look sport y sus esbeltas líneas laterales) sigue tan vigente como siempre y le agrega un techo textil deslizable (a la usanza de los descapotables de raza de antaño), que con solo operar un switch abre el techo desde el parabrisas hasta la tapa del baúl (hay una punto intermedio en la luneta o donde se quiera soltando el botón), dejando el habitáculo al aire libre en diez segundos (igual para volver a cubrirlo).

Es eficiente, porque está equipado con el multipremiado motor naftero Pure Tech, que a los títulos de Mejor Motor del Año 2015, 2016 y 2017 de su categoría en Europa, acaba de sumar hace pocos días el galardón International Engine of the Year 2018 entre los propulsores de 1.0 a 1.4 litros de cilindrada. No es para menos, se trata de un ultramoderno tricilíndrico de 1.2 L con turbocompresor e intercooler, inyección directa de combustible, doble árbol de levas a la cabeza (DOHC) y sistema de variación de las 12 válvulas (VVT), que desarrolla una potencia máxima de 110 CV a 5500 rpm y un par (torque) de 205 Nm (20,9 kgm) a solo 1500 rpm.

Este último parámetro (alto torque a bajas vueltas) y la rápida caja de velocidades automática (clásica, con convertidor de par) de 6 marchas (muy bien relacionada), que en Drive ofrece gran agilidad y maniobrabilidad (gracias también a la excelente respuesta de la dirección eléctrica variable) en su hábitat natural: el tránsito urbano, sin desentonar en la ruta (en la que a veces hay que apurar algunos cambios en forma manual-secuencial); así, acelera de 0 a 100 km/h en 10,6 s; de 0 a 400 m en 17,4 s; de 0 a 1000 m en 31,8 s; de 80 a 120 km/h (elasticidad) en 8,2 s y alcanza los 189 km/h (esto, según el fabricante).

Pero lo mejor de esta mecánica es la eficiencia que resulta de la baja cilindrada (downsizing): el consumo urbano es de 8,2 L/100 km (y podría ser menor con un tránsito más ordenado) y en ruta a 120 km/h ronda los 7 L/100 km/h. Un verdadero alivio para el bolsillo y, además, con estilo deportivo.

Las suspensiones son firmes, lo que produce un excelente comportamiento dinámico (dobla muy bien y con aplomo), pero reduce el confort de marcha, por lo que el andar es más bien áspero con pozos, baches y empedrados. El rubro seguridad activa está bien cubierto con los controles de estabilidad (ESP) y tracción (ASR), y la electrónica de los frenos: ABS, repartidor de potencia de frenada (REF) y ayuda al frenado de urgencia (AFU).

Manejar este DS 3 Cabrio es un placer. A la suavidad de funcionamiento del motor (con un agradable "ronquido" grave al acelerar) y el confort que depara la caja automática en ciudad, se le suma una posición de manejo de tono deportivo, con muy cómodas butacas envolventes con tapizado de tela y alcántara (textura similar a la gamuza) y un volante truncado, también con apliques de aluminio, que se ajusta en altura y profundidad. Como en todo vehículo de dos puertas (grandes y amplias), no es fácil acceder a las plazas traseras, que son bastante pequeñas (solo apta para viajes cortos y urbanos); también es pequeño el baúl, de 245 litros de capacidad, porque debe dejarle lugar al techo cuando se descorre, a lo que se suma una cerrada boca de carga.

Donde más se nota los años del modelo (desde 2010 en el mercado) es en el diseño interior, al que se le ha agregado una pantalla táctil de 7" con navegador, y en el equipamiento, al que le faltan algunos elementos modernos y ya comunes (cámara de retroceso y sensores delanteros, que sí tienen otras versiones), aunque sí cuenta con 6 airbags, anclajes Isofix, climatizador digital, luces delanteras de bixenón y más. El precio es de US$34.500 y viene importado de Francia.





Autor: REDACCION

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