Un muy emotivo encuentro de camaradería se concretó el domingo por la noche en la Sociedad Rural de Rafaala con los visitantes y mandatarios de las tres delegaciones de las ciudades hermanas. Participaron de la celebración el intendente Luis Castellano, el senador nacional Omar Perotti y el diputado provincial Roberto Mirabella, junto con los mandatarios de Sigmaringendorf, Fossano y Carcabuey: Alois Henne, Davide Sordella y Juan Miguel Sánchez Cabezuelo.

También estuvieron presentes el jefe de Gabinete, Eduardo López; el secretario de Desarrollo, Innovación y Relaciones Internacionales, Marcos Corach, entre otros funcionarios del equipo de gobierno local, como así también miembros de las comisiones de los hermanamientos y allegados a los mismos.

Durante la reunión, diversos audiovisuales rememoraron los principales hitos de los 35 años de vigencia de la Brüderschaft con la comunidad de Alemania, los 20 años del gemellaggio con la localidad de Italia y los dos años de hermandad con la población de España. Asimismo, se proyectó un video sobre la Fiesta de las Culturas 2016 realizada días pasados.

Asimismo, se hizo entrega al alcalde alemán y al italiano de las correspondientes declaraciones de Interés de la Cámara de Diputados de la Provincia de Santa Fe, de los 35° y 20° aniversarios respectivos entre Rafaela y ambos pueblos europeos, a través del diputado Roberto Mirabella.

Además, la oportunidad fue propicia para que las tres autoridades visitantes compartieran experiencias y buenos recuerdos con los últimos tres pares rafaelinos que gobernaron nuestra ciudad en estos años de amistad: el intendente Castellano y los exintendentes Ricardo Peirone y Omar Perotti.

"Es una gran satisfacción poder compartir por primera vez en la historia de los hermanamientos, la celebración del cumpleaños de Rafaela con las tres comunidades juntas", manifestó el actual representante rafaelino al hacer uso de la palabra.

Luego, en alusión al futuro, la máxima autoridad del Ejecutivo local afirmó: "se abren caminos nuevos; detrás hay 20 y 35 años de hermanamientos, en los que muchísimas personas han hecho esfuerzos enormes para llevarlos adelante y hacerlos crecer -muchas están aquí, otras ya no están entre nosotros-, y sobre esa base tan bien consolidada, tan respetable, que reconocemos y por la que estaremos siempre tan agradecidos, debemos ahora construir nuevos horizontes, encontrar nuevas líneas de trabajo y de vínculos; ese es el desafío".

"Lo mismo debemos hacer con Carcabuey, cuyo hermanamiento es más joven, apenas dos años; aquí también estamos trazando ideas para que esta llama crezca, con creatividad, con visiones en común, y como siempre, con esfuerzo y pasión, que es el legado que quienes iniciaron estos caminos dejan a las nuevas generaciones", puntualizó.