Renault trabaja incesantemente en el desarrollo de productos eléctricos para abastecer de ejemplares ecológicos al mercado mundial. Dentro de esas propuestas, la más "osada" es el Twizy, que está pensado como un vehículo totalmente de calle: lo podemos catalogar como una evolución de una moto o como una involución de un automóvil.

En su interior, en el que caben dos personas una delante de la otra, se destaca la sencillez: en el pequeño tablero de instrumentos hay sólo dos botones, para la baliza y "la caja de cambios". En cuanto a su motorización, el Twizy tiene equipado el impulsor más potente de los dos que se ofrecen en el mercado europeo, que alcanza los 80 km/h. Esta unidad está alimentada por baterías de iones de litio -se recargan en tres horas- que le dan una autonomía de 100 kilómetros y 17 caballos de potencia. La tracción es trasera y las transmisión es de una sola marcha.

Las sensaciones de manejos son raras porque los únicos sonidos que se escuchan son de los neumáticos contra el piso y de la fricción del motor. La dirección no tiene asistencia electrónica y es algo dura comparada con los vehículos habituales. (Fuente: Conduciendo.com)