MEXICO, 28 (AFP-NA). - Los presidentes de México,
Enrique Peña Nieto, y de Estados Unidos, Donald Trump, buscan
reducir la tensión en la relación bilateral tras reconocer las
diferencias de sus posiciones sobre el pago del muro fronterizo y
acordaron buscar una solución.
Las divergencias entre ambos países crecieron el jueves cuando
Trump le dio un ultimátum a Peña Nieto para que pague el muro
fronterizo con el que quiere detener la migración ilegal, pero el
presidente mexicano respondió cancelando una visita a Washington
programada para el 31 de enero.
Trump y Peña Nieto "reconocieron" en una llamada telefónica de
una hora efectuada este viernes sus "claras y muy públicas
diferencias de posición" sobre "el pago" del muro, que Trump ha
insistido que debe costear México, reportó en un comunicado la
presidencia mexicana.
Los mandatarios "acordaron resolver estas diferencias como
parte de una discusión integral de todos los aspectos de la
relación bilateral. Los presidentes también convinieron por ahora
ya no hablar públicamente de este controversial tema", añadió el
comunicado difundido por el gobierno de México. Poco después, la Casa Blanca difundió un comunicado casi
idéntico, solo que no mencionaba el acuerdo de no hablar en
público sobre el pago del muro como lo dice el que difundió la
presidencia mexicana.
Trump dijo, durante una conferencia conjunta con la primera ministra británica, Theresa May, la relación comercial con México
hace que los estadounidenses sean vistos como "tontos" porque el
intercambio deja a Estados Unidos con un déficit de 60.000
millones de dólares al año.
"Como todos saben, México ha negociado mejor y nos ha hecho
papilla gracias a nuestros anteriores presidentes. Nos hace quedar
como tontos", añadió Trump.
Por otra parte, Trump destacó la "relación especial" entre Estados Unidos y Gran Bretaña y su respaldo al Brexit tras recibir en Washington a la primera ministra británica Theresa May.