BANCO CENTRAL MANTIENE FRENADA SUSCRIPCIÓN DE BONOS BAADE A
CEREALERAS Y AUTOMOTRICES PROMETIDAS POR MORENO
Cerealeras y automotrices aún
no cerraron la suscripción de bonos BAADE por unos 800 millones de
dólares porque el Banco Central estaría en desacuerdo
con modificarle el sentido a esos títulos de deuda, pensados
inicialmente para blanquear capitales.
El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, en un
reciente encuentro con directivos de terminales automotrices,
había prometido que en los próximos días se lanzaría una nueva
serie de BAADE, para desvincularlo de la ley de exteriorización de
capitales no declarados ante el Fisco.
También les garantizó la posibilidad de operar en un mercado
secundario con ese título, el cual podría liquidarse en cualquier
momento por intermedio del Banco Central en caso de necesidad de
pesos, ventilaron los propios ejecutivos al término de la reunión
de esta semana con el secretario.
Si bien los empresarios pidieron a Moreno entre 20 y 30 días
para consultarlo con sus casas matrices, la autoridad monetaria
estaría dispuesta a bajarle el pulgar a la iniciativa, de igual
modo que sucedió con las cerealeras.
Moreno, quien ha salido en busca de dólares para inyectar a las
deprimidas reservas del Banco Central -en lo que va del año
bajaron más de U$S 9.000 millones-, pidió a las automotrices que
suscriban unos U$S 300 millones, después de haber solicitado a las
cerealeras que aporten unos U$S 500 millones.
En este sentido, se esperaba que grandes jugadores, como
Cargill y Bunge & Born, compren 100 millones dólares cada una en
BAADE, y el resto de las cerealeras unos 300 millones en total,
según su participación en el mercado.
Similares parámetros iban a tomarse en cuenta para la entrada
en acción de las automotrices, de las cuales se espera que
suscriban 300 millones de dólares en Bonos Argentinos de Ahorro
para el Desarrollo Económico (BAADE) si el Gobierno les asegura un
mercado secundario.
Pero el Banco Central estaría dispuesto a frenar, según pudo
averiguar Noticias Argentinas, este tipo de negocio, que
consistiría en traer dólares al país, comprar bonos y cambiarlos
en el mercado al precio del contado con liquidación -más de 9
pesos- y no al tipo de cambio oficial.
La semana pasada, la autoridad monetaria dejó en claro, en la
Comunicación "A" 5487, bajo qué parámetros se comercializan los
BAADE para "los residentes del país del sector privado no
financiero que ingresen nuevos endeudamientos financieros del
exterior", echando por tierra cualquier posibilidad de generar un
mercado secundario para estos bonos.
El Banco Central no emitiría una nueva comunicación específica
para automotrices, así como no sucedió con las cerealeras en
particular, dado que entiende que las reglas de juego están más
que claras para quienes deseen participar de la suscripción de
bonos BAADE como parte del blanqueo de capitales.
La postura de la entidad que preside Mercedes Marcó del Pont
pone en evidencia ciertas grietas en la relación con el secretario
de Comercio Interior, quien busca colaborar con el Gobierno en la
búsqueda de dólares, pero no logra -por el momento- el visto bueno
de la autoridad monetaria para materializar sus promesas.