La relación entre Universidad Pública y trabajo es vasta. Incluye aspectos clave para el desarrollo impulsado por el trabajo humano como la formación profesional y la innovación productiva a través de la investigación y la ciencia aplicada. También, los centros académicos desempeñan un rol clave en materia de estudios sociales y nuevas formas de organización y legislación laboral. Además, gestionan la relación con sus propias trabajadoras y trabajadores docentes y no docentes en permanente diálogo con sus representaciones sindicales, procurando el cumplimiento de derechos y obligaciones propias de su misma actividad institucional.
Particularmente, la Universidad Nacional de Rafaela (UNRaf) expresa esta vasta relación con el mundo del trabajo en su Estatuto Universitario, que es su Artículo 6 establece: “La UNRaf define su misión a partir de constituirse en un espacio institucional que contribuye a fortalecer el sistema educativo, científico y tecnológico en todos sus niveles y a formar personas altamente calificadas y comprometidas, capaces de diseñar y conducir las estrategias del sector productivo y laboral, anticipar los desafíos de la gestión territorial y ambiental y consolidar una cultura de la cooperación, la igualdad y la responsabilidad pública.”
Los alcances de este texto, base organizativa de esta joven universidad, expresan todo el potencial del vínculo con el mundo del trabajo en su sentido amplio. En principio, la conformación de la oferta académica está sólidamente ligada a la evaluación de cada propuesta formativa en función de los sectores productivos que demandan la incorporación de profesionales con perfil innovador, conciencia ambiental e idoneidad en la gestión e implementación de nuevas tecnologías en un mundo en permanente cambio.
Este cambio constante, acelerado y global, propone desafíos que incluso, imponen la identificación de habilidades laborales que ya no serán demandadas, trabajos que dejarán de existir para dar lugar otros para los cuales, deben proponerse nuevos enfoques y programas de estudios. La formación de profesionales versátiles, creativas y creativos, capaces de gestionar esa transformación, resulta urgente ante el llamado del desarrollo que plantean conceptos como el de “sociedad del conocimiento” al cual responden las comunidades más prósperas del mundo.
Paralelamente, cada una de estas demandas se plantean en relación al territorio de Rafaela y la región. En este sentido, nuestra ciudad y cada una de las localidades que conforman la zona de influencia de la UNRaf, cuentan con una histórica relación con el trabajo como base de su organización social y su vida en comunidad. La matriz productiva diversa, la actitud emprendedora, la cultura asociativa y el esfuerzo compartido como valores fundamentales del quehacer cotidiano, forman la base ética sobre la que esta Universidad Pública construye su identidad y su proyección hacia el futuro.
La incorporación de nuevas tecnologías y la búsqueda de la innovación constante a través del conocimiento, representa una condición ineludible para el desarrollo de las PyMEs ya existentes y el surgimiento de nuevos emprendimientos. La formación de trabajadoras y trabajadores en los distintos ámbitos de desempeño operativo y profesional es el camino que presenta mayores ventajas para que nuestra región siga siendo un referente de desarrollo integrado en el país. El perfil innovador de la propuesta institucional de la UNRaf con una fuerte presencia de saberes referidos a nuevas tecnologías y enfoques en el campo de la investigación y la ciencia aplicada, resulta una significativa contribución para complementar acciones orientadas encontrar nuevas respuestas a las demandas de la comunidad y a la vez, para proponer alternativas que se anticipen a escenarios futuros.
La perspectiva de género y el reconocimiento de identidades personales y colectivas diversas es otro de los aspectos que buscamos incorporar de manera contundente y definitiva. La equidad en la formación de trabajadoras profesionales en todas las disciplinas es central, en especial en aquellas de corte tecnológico para las que históricamente las mujeres e identidades diversas fueron relegadas. Esto resulta imprescindible para no seguir incurriendo en el absurdo de limitar el talento y las trayectorias profesionales con políticas y conductas ya señaladas como injustas y obsoletas desde todo punto de vista.
Como Universidad Pública, la UNRaf se propone consolidarse como un espacio de puertas abiertas para toda la comunidad que ve en el conocimiento, una oportunidad de desarrollo sólido, sustentable y equitativo. Esto solo puede lograrse junto a las trabajadoras y los trabajadores que siempre han sido, desde que se tiene memoria, los protagonistas de la historia humana. "Celebramos un nuevo día de reivindicación del trabajo como un derecho humano fundamental, de visibilización de la demanda de quienes aún no pueden ejercerlo en plenitud y en condiciones dignas, y de quienes en cada tarea realizada encuentran su máxima expresión de identidad individual y colectiva", resaltaron desde la casa de estudios superiores.