MUNICH, ALEMANIA, 23 (AFP-NA). - Nueve muertos y 21
heridos dejó un tiroteo este viernes en un centro comercial de
Múnich (sur de Alemania), según la policía de esa ciudad, que aludió
a un acto cometido "probablemente" por un solo autor que se
suicidó.
"En el marco de la investigación, hemos descubierto una
persona que se dio la muerte", tuiteó la policía, y añadió que
"se trata muy probablemente del autor, que actuó solo".
La policía de la ciudad bávara (sur de Alemania) mencionó un
"final de la alerta" lanzada al producirse la matanza, aunque se
mantenía "prudente".
Los transportes en común volvieron a funcionar la noche del
viernes al sábado, según tuiteó la policía bávara. La estación
central de trenes de Múnich, que había sido evacuada, reabrió y
los trenes que habían quedado bloqueados volvieron a circular.
La canciller Angela Merkel convocó para este sábado una
reunión de su consejo federal de seguridad en Berlín para
"analizar la situación", indicó la noche del viernes su
portavoz.
Según informaciones recogidas por la AFP, varios testigos
dijeron que los atacantes eran hombres con rasgos "árabes". El
portavoz de la policía no confirmó esta información.
La televisión alemana de información NTV por su parte indicó
que según un video aficionado el autor o uno de los autores de
la matanza parece proferir insultos racistas antes de disparar,
"lo que puede hacer pensar en un acto de un extremista de
derecha".
El tiroteo comenzó poco antes de las 16H00 GMT en una
hamburguesería, indicó a la AFP una fuente policial.
Según el rotativo Bild, un hombre corrió por el centro
comercial y disparó a varias personas, antes de huir en
dirección a una estación de metro.
La policía de la capital bávara dijo a la AFP que podría
tratarse de un posible acto de "terrorismo", mientras que otro
portavoz de las fuerzas del orden en el lugar de los hechos y
citado por la prensa advirtió de "una situación terrorista" en
curso.
PANICO
Se trata del tercer ataque contra civiles en Europa
Occidental en menos de diez días, después del atentado con un
camión en Niza (sur de Francia), el 14 de julio, que dejó 84
muertos, y un ataque con un hacha en un tren en Baviera, que se
saldó con cinco heridos.
El presidente estadounidense Barack Obama prometió a las
autoridades alemanas "todo el apoyo que necesiten", mientras que
el jefe de Estado francés, François Hollande, dirigió un
"mensaje personal de apoyo" a la canciller alemana Angela
Merkel. "Preocupado y siguiendo la evolución del ataque en Múnich. El
pueblo alemán cuenta con todo nuestro apoyo y afecto", tuiteó el
presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy.
El presidente alemán Joachim Gauck dijo estar "horrorizado"
por el "ataque asesino" de Múnich, en un comunicado, y expresó
su solidaridad a las víctimas y a sus allegados.
La policía desmintió que se hubiera producido un segundo
tiroteo en otro lugar del este de la ciudad, pese a que
supuestos testigos dijeron haberlo presenciado.
Los hechos se produjeron cuatro días después de un ataque con
un hacha perpetrado el lunes en Wurzburgo, cuando un solicitante
de asilo atacó a los pasajeros de un tren.
Cinco personas resultaron heridas, en concreto cuatro
turistas chinos de Hong Kong en un tren y una transeúnte.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó este
ataque, el primero reconocido por esta organización en Alemania.
El gobierno alemán duda, en cambio, de que el EI encargara el
atentado.
El ministro de Interior, Thomas de Maizière, había advertido
el miércoles a sus conciudadanos de que Alemania "se encuentra
en el punto de mira del terror internacional".
"La situación es seria, debemos contar con que en Alemania
también se prepare para atentados de pequeños grupos o personas
radicalizadas", señaló el ministro en una rueda de prensa.
A unos 500 kilómetros de Múnich, el estado de Renania del
Norte-Wesfalia anunció que había elevado sus medidas de
seguridad con efecto inmediato.
También Austria extremó "significativamente" sus medidas de
seguridad en los cuatro estados que comparten frontera con
Alemania y puso a sus fuerzas de élite, "Cobra" en alerta tras
el ataque en Múnich, informaron responsables austriacos el
viernes.