Editorial

Tercerización laboral

El jueves 8 de julio pasado los trabajadores tuvieron una gran jornada de lucha. "Los ferroviarios de MCM, Comahue y Líderes, tercerizados, sin estabilidad y con sueldos que representan menos de la mitad de los del convenio y por debajo de la línea de pobreza, que vienen de meses de acciones y de cortar el puente Pueyrredón ¡dijeron basta!", expresó en fuertes declaraciones, que fueron replicadas por varios medios, el diputado bonaerense y metrodelegado Claudio Dellecarbonara.

Despedidos de Trenes Argentinos, Edesur y de familias de Guernica que siguen luchando por tener su vivienda propia, protagonizaron una masiva protesta, que incluyo el corte de vías visibilizando lo que empresarios y gobiernos pretenden naturalizar: que en Argentina hay "trabajadores de primera y de segunda".

Con la imagen de Mariano Ferreyra, asesinado por la patota de la U.F. en 2010, como símbolo de la lucha contra la tercerización y al grito de, "¡Pase a planta permanente!" e "¡Igual trabajo, igual salario!", se intentó mostrarle un camino a la clase trabajadora.

Lograron dar un importante primer paso con la convocatoria a una mesa para discutir su pase a planta permanente. Trenes Argentinos es una empresa estatal, por lo cual sus trabajadores se plantaron para obligar al Gobierno a darle una respuesta favorable a sus reclamos.

Pero este verdadero fraude laboral no ocurre solamente en los ferrocarriles. En fábricas, en los servicios, depósitos, supermercados, está presente en todos los ámbitos laborales. Una estafa avalada por todos los gobiernos y las direcciones burocráticas de los sindicatos que genera enormes ganancias para las empresas a costa de las condiciones de vida de los trabajadores.

En medio de una durísima situación económica y social, con más del 40% de la población bajo la línea de pobreza, congelamiento de sueldos, despidos y una inflación descontrolada, el Gobierno parece estar dedicado prioritariamente a ajustar las cuentas a la medida del FMI.

Dellecarbonara sostuvo que "el macrismo y sus aliados, después de un Gobierno con promesa de pobreza cero y certezas de ataques al pueblo pobre y trabajador, que dejó millones de nuevos pobres y que hundió definitivamente los salarios, Alberto Fernández y Axel Kicillof ahora ensayan un recambio de figuritas y pretenden presentarse como palomas moderadas, pero no lograrán engañarnos, porque no representan los intereses de quienes venimos perdiendo año tras año".

"El Frente de Todos prometió mejorar la vida de la clase trabajadora y revertir las medidas de Mauricio Macri, pero en realidad profundizó las políticas de ajuste y devaluatorias para sostener el pago de una deuda ilegal y mantiene al día de hoy más de un tercio de los asalariados precarizados", sostuvo en otro momento el legislador de extracción sindical.

Aquí la "grieta" desaparece y los partidos tradicionales se muestran unidos y cómplices. Incluso, voces como las de los libertarios o la del reaparecido Florencio Randazzo, tienen entre sus planes avanzar con una reforma laboral para achicar salarios y bajar los "costos empresarios", pero todos saben a quiénes representan.

La tercerización es una de las principales herencias del menemismo que ningún Gobierno posterior modificó. Es un escandaloso negociado que favorece a un puñado de empresarios beneficiados de estos contratos avalados por el Estado, que es el mayor precarizador y que sostiene este fraude con fondos públicos.

Si un sector de trabajadores logra terminar con la tercerización, será un gran empuje para los millones que se encuentran en esas condiciones en todo el país.

El diputado recordó que desde las líneas Roca, Mitre y San Martín, venían copando la estación Constitución para ser escuchados, algo que nunca ocurrió, por lo que sumaron a esta pelea a trabajadores y usuarios buscando la unidad. Hicieron ruidazos, cortes, marchas, coordinaron con otras luchas y golpearon todas las puertas, sin encontrar respuestas.

Denunciaron que desde el Gobierno se intentó amedrentar a los manifestantes mediante un fuerte operativo represivo al que le hicieron frente junto otros sectores que acompañaron el corte, adoptando de esa manera una firme postura ante un conflicto que por el momento no encuentra una solución que pueda contemplar los intereses de los trabajadores.

"Este ejemplo, si bien es todavía pequeño, demuestra la potencialidad de la coordinación de todas las luchas para superar a las direcciones traidoras de los sindicatos y enfrentar el ajuste y los ataques de Gobiernos y patronales contra la clase trabajadora y sectores populares, pero también muestra la necesidad de seguir avanzando en la unidad de la izquierda clasista y socialista para que pueda emerger como tercera fuerza política nacional", concluyó Dellecarbonara.

Autor: REDACCION

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