Ambos estadios están en el top ten de los estadios más emblemáticos de todo el mundo,
considerando su capacidad, estructura, antecedentes, campeonatos ganados y partidos
memorables. Por todo esto y mucho más, sin duda estos dos símbolos de la cultura futbolística
de la argentina, merecen estar en el podio del fútbol mundial.

Es mucha la historia que rodea a ambos clubes y muchas las anécdotas que cada estadio ha
vivenciado a lo largo de toda la vida institucional de Boca Junior y de River Plate. Estos dos
gigantes se han convertido en la casa de muchos hinchas que cada semana colman sus
instalaciones para acompañar al club de sus amores. Cargado de significaciones estas dos
edificaciones han superado cualquier valor monetario y constructivo por el valor simbólico que
revisten para el barrio, el hincha y la identidad de un país.

El estadio de River Plate: En 1934 los arquitectos José Aslan y Héctor Ezcurra fueron los
ganadores del concurso de anteproyectos que organizó el club para la construcción de su
estadio y pista de atletismo. En su diseño, los arquitectos tomaron como referencia el Coliseo
de Roma, ya que no había en el país antecedentes de estadios con dimensiones y capacidades
de esa envergadura, de allí proviene su planta elíptica.

El estadio tiene actualmente cuatro tribunas de hormigón armado que conforman su volumen
ovalado. A lo largo de su vida, el estadio sufrió diferentes remodelaciones. En 1958, se agregó
la última tribuna (la Sívori) que modificó la forma de herradura que presentaba hasta ese
momento y se completó el perímetro.

En 1978, con motivo del Campeonato Mundial de
Fútbol, el mismo estudio responsable del proyecto original (Aslan y Ezcurra) realizó
importantes mejoras en las instalaciones para los jugadores, para la prensa y las autoridades,
además de la construcción de la tribuna Almirante Brown Alta. Se incorporaron tres nuevas
escaleras de acceso de hormigón armado, un nuevo sistema de iluminación y asientos
especialmente diseñados por Gui Bonsiepe – reconocido diseñador alemán -; todos los accesos
para el público se modificaron de acuerdo con el caudal de evacuación que abastecen y se
colocaron portones antiavalancha con el fin de asegurar la salida del estadio en situaciones de
emergencias.

El Club Atlético Boca Juniors: La Bombonera fue inaugurada el 25 de mayo de 1940 en la
manzana comprendida por las calles Brandsen, Del Valle Ibarlucea, Aristóbulo del Valle y las
vías del actual Ferrocarril Roca. La empresa de origen alemán GEOPE, fue la contratista que
llevó a cabo la novedosa estructura de hormigón armado. Su planta tiene tres lados
ligeramente curvos que se corresponden con la ubicación de tres sectores de bandejas para el
público. El cuarto lado –recto y completamente vertical- se ubica sobre la calle Del Valle
Ibarlucea y fue reconstruido en 1996 para alojar palcos y plateas preferenciales, según
proyecto del estudio Manteola, Sánchez Gómez, Santos, Solsona y Asoc.

Durante la presidencia de Mauricio Macri, también se realizaron obras de ampliación de la capacidad del estadio. Desde entonces, La Bombonera tuvo varias mejoras en sus instalaciones y en su equipamiento
tecnológico.

En 2001 se creó el Museo de la Pasión Boquense que fue el primer Museo temático dedicado al fútbol de América. Sus casi 2000 m2 de superficie están ubicados debajo de una de las tribunas. Los autores del proyecto original del estadio, también lo fueron del Mercado de Abasto de Buenos Aires (actual Abasto Shopping).