1. Actividad económica: de acuerdo al ISAE, en el mes de febrero de 2015 el índice

mostró una variación positiva del 0,5% mensual y una caída del -0,6% con respecto a

febrero de 2014. Por otra parte, en los dos primeros meses de 2015 la actividad

económica de la provincia decreció un -1,2% con respecto a igual período de 2014.

Economista Jefe

2. Cuentas públicas: en lo que atañe a las cuentas públicas, aún no se conocen los

resultados financieros completos para el ejercicio 2014 pero hasta el mes de

noviembre el rojo acumulado era de $121,2 millones. Para el primer trimestre del

año, las cuentas provinciales arrojaron un resultado negativo de $ 248 millones.

3. Exportaciones: entre 2004 y 2014 las exportaciones santafesinas se duplicaron,

pasando de 7.155 millones de dólares a algo más de U$S 15.000 millones. Las

cantidades exportadas en la década solo crecieron un 10%, por lo tanto, el

significativo aumento mencionado está explicado básicamente por variación de

precios. Por cierto, el precio promedio para el total de exportaciones provinciales

creció un 95% entre 2004 y 2014. No obstante, una creciente pérdida de

competitividad en el último lustro llevó a una reversión en la tendencia. El 2014

marcó el tercer año consecutivo de caídas en las exportaciones.

4. Inversiones Privadas: según el Centro de Estudios para la Producción (CEP), el

monto anunciado en inversiones privadas para 2014 implica un crecimiento casi del

80% en relación al de 2004 (U$S 743 millones), es decir, en una década avanzó 1,8

veces. Al desagregar los datos por sectores, para el año 2014 el 53,3% correspondió

a infraestructura, el 45,9% a la industria manufacturera mientras que el resto se

distribuyó entre los rubros comercio y servicios (0,7%) y financiero (0,1%). En

relación al año 2004, se destaca el significativo crecimiento de los anuncios de

inversión en infraestructura ya que en dicho año su ponderación era del 16%,

5. Inversión pública: la inversión en obra pública llevada a cabo por el gobierno

provincial -medida a través de la Inversión Real Directa (IRD)- ascendió a U$S 492

millones en 2014, guarismo que representa un 37% del total invertido por empresas

privadas. Asimismo, cuando se analiza el presupuesto provincial en su conjunto, se

advierte que sólo el 7,5% del total de egresos de Santa Fe se destina a obra pública.

Es decir, los fondos que el Estado provincial destina a inversión son relativamente

bajos, tanto cuando se los contrasta con los del sector privado como cuando se

analiza la asignación de recursos públicos.

En resumen, la actividad económica provincial está en declive y esto conlleva un

estancamiento en la creación de empleo privado. Hay una alerta en las cuentas

públicas, habida cuenta del resultado negativo y porque la inversión en obra pública

es insuficiente. También, las ventas externas encienden una luz amarilla: cayeron

por tercer año consecutivo y los problemas de competitividad se hacen cada vez más

notorios.

El dato positivo es que pese al escenario macroeconómico incierto, el

sector privado sigue invirtiendo. En función de esto, se puede decir que habrá que

trabajar para una gestión de recursos públicos más eficiente, que permita canalizar

fondos a obras de infraestructura y ganar competitividad. Esto puede darse sin

recurrir sistemáticamente al aumento de impuestos, sino por el contrario,

buscando financiamiento a bajo costo y mayor eficiencia en el gasto.