Dentro de la discrecionalidad con la cual el gobierno nacional distribuye los recursos entre las provincias, tanto los coparticipables como otros que son otorgados bajo otras figuras, incluso de ayudas especiales frente a determinadas situaciones de cierta urgencia, Santa Fe es una de las más desfavorecidas. En tal sentido las estadísticas resultan contundentes, estando mucho más allá de todo el palabrerío político que suele hacerse en torno al tema, apareciendo nuestra provincia como la que menor cantidad de recursos recibió de acuerdo a sus posibilidades, en el período entre 2003 y 2012.

Esta información fue respaldada por análisis estadísticos realizados por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), una asociación civil integrada por economistas de diversa extracción, siendo el referente de la misma Nadin Argañaráz.

Durante el período aludido Santa Fe recibió 11.154 millones de pesos, mientras que Santa Cruz recibió 16.000 millones de pesos, además de lo que le corresponde por coparticipación. Un parámetro realmente sorprendente es el que surge cuando se toma la cantidad de recursos otorgados y se la divide por los habitantes de cada distrito, ya que según el mismo cada santacruceño recibió 66.000 pesos durante el lapso referido, en tanto que para los santafesinos esa suma fue de sólo 3.000 pesos, es decir, una diferencia de 22 veces, lo cual es un fiel reflejo de la injusticia que se comete desde el gobierno nacional cuando se distribuyen los fondos entre las provincias.

La lectura obligada que se hace del sistema impuesto como norma por el gobierno nacional desde 2003 en adelante, se hizo conocido como "política de la billetera", es decir, doblegar voluntad y generar sometimientos con la entrega de fondos en forma discrecional, beneficiando en primer lugar a los gobernadores de su mismo partido o bien aquellos que demostraron ser incondicionales en forma absoluta.

Una comprobación de lo que se expone, es que del período de una década que fue analizado, en su primera parte Santa Fe estuvo gobernada por el justicialismo, siendo entonces mucho más favorecida con recursos desde que en 2007 ingresó la administración socialista, pues desde allí en adelante el desequilibrio comenzó a ser cada vez más notorio.

Algo menos de un año atrás, el gobierno santafesino formuló un claro planteo respecto a la discrecionalidad con la cual se habían distribuido Aportes del Tesoro Nacional (ATN), que tuvieron como destino en su mayor parte a la provincia de Buenos Aires y a otros distritos gobernados por el justicialismo, o bien afines al kirchnerismo, como el caso de la provincia de Santiago del Estero, que resultó una de las más favorecidas en estos últimos años.

Los ATN se conforman a través de un fondo integrado por los descuentos que se aplican a la coparticipación de provincias y municipios, aportando Santa Fe por ese concepto 330 millones de pesos el último año. Recursos que luego, son derivados hacia otras provincias urgidas por mayores necesidades.

Queda claro entonces el justificado reclamo que ha venido haciendo la provincia de Santa Fe por esta discriminación que viene sufriendo desde el gobierno nacional en cuanto a la distribución de recursos, en aquellos casos que corresponden a metodologías al margen de la ley de coparticipación. La cual, además, también se encuentra desactualizada y con insistencia se ha propuesto su reforma y adecuación a las actuales circunstancias, como manera más adecuada para sostener el federalismo. Es que ahora, de los recursos coparticipables, que son los principales, la Nación se queda con el 74% y distribuye sólo el 26% restante entre las provincias. 

En cuanto a los fondos conocidos como "la caja", que se reparten en forma arbitraria, en 2003 sumaban 4.456 millones de pesos y en 2013, exactamente una década después, llegaban a 51.096 millones, quedando claramente expuesta la metodología utilizada para doblegar voluntades de gobernadores e intendentes.

Tomando como ejemplo lo acontecido el año pasado, Santa Cruz recibió 20.023 pesos per cápita, luego La Rioja 7.142, Tierra del Fuego 5.845 y Formosa 4.605 pesos, encabezando la nómina, mientras que entre las más castigadas se encuentran Ciudad de Buenos Aires con 284 pesos por habitante, Santa Fe con 1.244, provincia de Buenos Aires con 1.272, Mendoza 1.280 y Corrientes 1.370 pesos.