
Un hombre de 46 años quedó en prisión preventiva en el marco de un legajo penal en el que es investigado por circular en auto por la ciudad de Santa Fe con un arma de fuego con silenciador y con cocaína fraccionada para su venta al menudeo.
La medida cautelar fue impuesta por el juez Sergio Carraro a raíz del pedido formulado por la fiscal María Lucila Nuzzo en una audiencia llevada a cabo esta mañana en los tribunales de la capital provincial.
“La Defensa del imputado solicitó medidas alternativas a la privación cautelar de la libertad, pero desde la Fiscalía nos opusimos”, informó Nuzzo. “El juez entendió que el planteo de los abogados defensores era insuficiente para mitigar los riesgos procesales del caso, e hizo lugar a nuestra solicitud”, agregó.
Arma de fuego y droga
La fiscal Nuzzo precisó en la audiencia que “al imputado se le secuestró una pistola marca Bersa modelo 25 calibre 22 con numeración suprimida, con silenciador, con tres cartuchos intactos en su interior y de la que no tenía la autorización correspondiente”.
“También tenía en su poder 427 gramos de cocaína fraccionada y distribuida en cinco envoltorios de nylon; 75 cartuchos de distinto calibre; un cilindro metálico de 11 centímetros de largo; una balanza electrónica de precisión; una agenda con anotaciones varias y documentación de nueve automóviles y de tres motos”, enumeró la fiscal.
“El imputado fue aprehendido minutos después del mediodía del jueves 27 de febrero, unas cuadras al norte de Boulevard”, subrayó la fiscal. “Venía circulando en auto con todo lo que se le secuestró, cuando vio un móvil policial, bajó abruptamente de su vehículo, comenzó a correr e hizo caso omiso a la voz de alto de los agentes que estaban en el lugar”, precisó.
Nuzzo indicó que “finalmente, fue aprehendido minutos después, y luego de una persecución callejera en horas del mediodía, a plena luz del día y en el macrocentro de la ciudad”.
Calificaciones penales
La fiscal Nuzzo le atribuyó al imputado la autoría de los delitos de portación ilegítima de arma de fuego de guerra; tenencia ilegítima de estupefacientes con fines de comercialización y resistencia a la autoridad.