Días atrás se realizó la Asamblea General Extraordinaria de Delegados Congresales de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra), en la que se aceptó un aporte excepcional por parte de los empleados a la cooperativa SanCor. Puntualmente, el gremio avaló diferir un 15% del salario de los trabajadores de la láctea durante seis meses, con el objetivo de descomprimir la complicada situación de la cooperativa.
En un comunicado publicado en su página web, el gremio expresa que "el diferimiento del pago del 15% de los salarios regirá por seis meses, a partir de abril de este año hasta septiembre inclusive, a efectuarse sobre la liquidación de cada mes, en función del que se encuentre vigente de acuerdo a las escalas vigentes".
También explica el texto que "la devolución de los importes diferidos se efectuará a los 12 meses de cada mes", y se "actualizará el importe diferido conforme las escalas salariales vigentes acordadas entre Atilra y la industria".
También aclara que "en el acta firmada se establece que el diferimiento se podrá efectuar en la medida que SanCor pague en término los salarios", y que la empresa de Sunchales "se abstendrá durante dicho período de seis meses de efectuar despidos de trabajadores".
También establece la "suspensión por el lapso de seis meses del pago del aporte patronal mensual permanente, aplicándose, tanto a los periodos transcurridos adeudados como a los correspondientes a los seis meses siguientes, generándose un crédito a favor de Atilra, con las siguientes condiciones: 12 meses de gracia para el repago del crédito; deuda nominal sin intereses ni actualización, gastos ni honorarios".
En consecuencia, señaló que "a partir del séptimo mes inclusive se deberá abonar el aporte en forma íntegra".
DENUNCIAN DIFAMACIÓN
La reunión de delegados expuso además el malestar por una “campaña de difamación contra el gremio” que dicen se ha desplegado. Textualmente expresan que “desde un sector de los empresarios dijeron que contaban en el máximo nivel gubernamental con el apoyo necesario y suficiente para desestabilizar al sindicato”.
“Ha comenzado en estos días pasados una campaña de difamación hacia el gremio. Tememos que en breve esa campaña de difamación se potencie, de modo que sirva como excusa para producir la intervención de Atilra. Si esta situación llegase a producirse, desde este máximo cuerpo de dirección y administración del sindicato, se adopta la decisión de producir una huelga de alcance nacional en la industria”.
Los delegados congresales propusieron que de persistir la “avanzada de difamación contra Atilra” se llevara a cabo un plan de lucha nacional que dejara a todo el país sin leche.
“Sabemos que el objetivo de los sectores que llevan adelante esta campaña de debilitamiento es intervenir el sindicato, dejando a los trabajadores en un estado de indefención para pretender que resignemos salarios y derechos convencionales para lograr el ajuste que buscan imponer desde el gobierno nacional” expresaron.
Y aprovecharon para convocar “a todos los compañeros del país a prepararse para defender hasta las últimas consecuencias los derechos y condiciones laborales que tanto nos costó conseguir”.