Información General

Regina Grisolia recibió una mención especial en el certamen de poesía

Tal como se adelantó en este medio, en el marco de un total de 117 obras inscriptas, las autoras Sonia Scarabelli y Carina Sedevich resultaron ganadoras del Premio Provincial de Poesía “José Pedroni” 2022, tradicional certamen literario que impulsa el Ministerio de Cultura de la provincia. Además, se otorgaron cinco menciones distribuidas por polos del territorio santafesino, una de las cuales fue para la rafaelina Regina Grisolia. Dicho reconocimiento la hace merecedora de $100 000.
El jurado estuvo conformado por las poetas Larisa Cumin y Alejandra Méndez, y el poeta y narrador Santiago Alassia.
En diálogo con Regina, comentó para este medio algunos detalles de la obra y cómo se siente al haber obtenido esta mención especial.
"Me puso muy contenta la mención porque es un premio que respeto mucho, porque es una provincia que literariamente es un referente. Muchas de las poetas que más admiro son santafesinas, te nombro a Diana Bellesi por solo nombrar una. De hecho, las ganadoras de la presente edición son poetas que me gustan mucho y me pone muy contenta formar parte de ese premio, me enorgullece mucho", expresa la autora.
"La obra se llama 'Casa furtiva', es un poemario que vengo escribiendo hace bastante, que inicia con la pandemia, en un momento en que estábamos atravesando situaciones emocionales, de salud mental. Fue bien difícil a nivel social y a nivel personal también; yo estaba viviendo sola en ese momento, el encierro, todo lo que pasó... lo pensamos hoy y es distópico aunque lo vivimos no hace tanto. Como ocurre en muchas situaciones de mi vida, lo que aparece ahí es la necesidad de escribir y la expresión más afín a esa escritura impulsiva es la poesía. Yo siempre tengo cuadernos y hay poemas de este poemario que escribí en el celular. Por ejemplo, hay uno que venía caminando para mi trabajo de ese entonces en la Secretaría de Educación; me acuerdo que era una mañana bien temprano, que en días 'normales' hay mucha circulación de autos y de gente yendo al trabajo y recuerdo que no había nadie. Me pareció impactante atravesar la plaza y no cruzarme una sola persona en todo el camino, solo animales, aves. Así arrancá el poemario, en ese contexto, impactada por lo que pasaba en la naturaleza", detalla. Todos podemos decir hoy que tenemos recuerdos de aquellos tiempos, en donde todo era encierro y protocolos, donde todo parecía oscuro. 
Llevar a la escritura la pandemia por Covid-19, sin dudas es un desafío. Regina buscó retratar, entonces, esa Rafaela vacía, esos rincones y espacios a los que logró llegar con el poder de la observación y la minuciosidad: "La naturaleza tiene un impacto muy fuerte en mi escritura. Me gusta escribir desde el cuerpo, pero desde un cuerpo que es indivisible de todo el resto, de lo que podemos llamar naturaleza. Buscar donde la naturaleza se expresa dentro de lo urbano y también en nosotras mismas".
Luego de la tormenta que significó la pandemia, la vida de Regina dio un giro rotundo: "Me salió una oportunidad de ir a estudiar una maestría de escritura creativa en Nueva York (NYU); yo tenía otros planes totalmente diferentes y fue consecuencia de la pandemia empezar a tomar decisiones que quizás en otros momentos no las habría tomado. Me fui en noviembre del 2021".
Entonces, la autora vivenció este cambio a través de la escritura, de lo que creía que podía ayudarla en un momento de tanta novedad y sorpresa constante: "Yo trabajo mucho en la reescritura y en la corrección, de hecho el poemario tiene alrededor de 3 años de trabajo. Fue un proceso largo en lo personal, en lo poético y en lo que es el oficio de escribir. El poemario hace todo este arco de lo que implicó para mí habitar esta ciudad tan diferente. Todo el mundo tiene la imagen de lo que es Nueva York pero de pronto habitarla fue un impacto muy grande en mi subjetividad. Yo ya venía escribiendo sobre esto, sobre lo que implica el concepto casa, no solo en el lugar tradicional sino en términos emocionales; dónde vamos creando nuevos hogares, dónde somos hogar, qué es eso que nos hace sentir como en casa... Ahí entra la lengua, los vínculos, la escritura como un lugar que siempre es casa para mí".
Descubrir, desentrañar, desempolvar recuerdos... "Para mí la poesía siempre es un canal para buscar, no siempre cómodo, pero en el que me siento un poco en casa, con todas las contradicciones", dice Regina.
En resumen, comenta: "Hay mucho de los paisajes, de lo que es Rafaela, de lo que ha sido mi experiencia, especialmente en esa ciudad pandémica que viví los últimos dos años que estuve y mis primeros meses en Nueva York".
En cuanto a sus proyectos con este poemario, afirma: "Me gustaría mucho, ahora que fue premiado, pensar en publicarlo. Voy a ponerme en campaña para conseguir alguna editorial".
Para concluir la nota, la autora reflexiona: "Así como la casa no es un lugar individual, la escritura también es un lugar colectivo. Es una actividad que siempre, más allá de tener fama de ser solitaria, me encuentra con un montón de personas, con miradas previas a lo que podría pensarse como cierre de una obra".
Sin dudas, esta mención llega como una luz, luego de años de trabajo y de reflexión profunda en torno a esta obra. Pronto, quizás, se podrá leer y disfrutar "Casa furtiva" en todas las librerías de la ciudad, para luego volver a estas palabras de la autora y reconocer en ellas el germen de lo que es realmente el poemario.  

SOBRE EL CERTAMEN DE POESÍA
El Premio Provincial de Poesía “José Pedroni” homenajea a la figura del icónico poeta santafesino nacido en Gálvez en 1899, pero cuya vida y obra, luego de un paso por Rosario, se realizó fundamentalmente en la ciudad de Esperanza.
Para el crítico literario y docente Martín Prieto, Pedroni es el primer poeta moderno de Santa Fe, el primero en mirar alrededor y construir para el territorio una dimensión simbólica, imaginaria, poética, y en hacerlo con los instrumentos formales contemporáneos a su época. Algunos poemarios de Pedroni son La gota de agua (1923), Gracia plena (1925), Poemas y palabras (1935), Diez Mujeres (1937), El pan nuestro (1941), Nueve cantos (1944), Cantos del hombre y Canto a Cuba (1960), La hoja voladora (1961) y El nivel y su lágrima (1963).
En la anterior edición del premio “José Pedroni”  (2019), el Ministerio de Cultura santafesino recibió 162 obras literarias en su convocatoria, de las cuales 100 originales eran de la categoría inéditas y 62 de la categoría de obras editadas.  

Autor: REDACCION

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web