BUENOS AIRES, 3 (NA). - La venta de autos usados alcanzó en la última semana las 1.370.000 unidades por lo que quedó a sólo 39 mil coches de superar el récord histórico logrado en 2008, y el sector se quejó de la fuerte presión impositiva que debe enfrentarse.
El titular de la Cámara del Comercio Automotor (CCA), Alberto Príncipe, criticó que hasta cuatro de cada diez autos usados se comercializan entre particulares "en forma irregular o por agencias que no están inscriptas ante el fisco, mientras que el comercio legal "está totalmente fiscalizado y controlado" por el Estado.
De acuerdo con los datos de la entidad, la venta de autos usados había alcanzado 1.409.000 unidades en 2008 y luego caído a 1.328.000 millones en 2009, por el impacto de la crisis internacional en el país. Al 26 de noviembre de 2010, la venta de autos usados alcanzó las 1.370.000 unidades, superando las de todo 2009 cuando aún falta más de un mes para cerrar el año y acercándose con claridad al récord de 2008.
Los empresarios que operan en este sector obtienen una rentabilidad del 14 por ciento anual, tras abonar el IVA, Ganancias, Impuesto al Cheque, Ingresos Brutos y el Impuesto a los Sellos, por lo que se quejan de que la presión tributaria "es muy elevada". Otra queja del empresario fue por el de la ley de Garantía que rige sobre el sector, que obliga a garantizar el funcionamiento correcto del vehículo usado comercializado por 90 días sin límite de año de modelo ni de kilometraje.
"Esta ley de Garantías no se hizo pensando en los autos usados, pero existe, se aplica y no se modifica. ¿Podría llamarse discriminación o abuso que pone en riesgo el patrimonio de aquellos que obran de buena fe?", criticó Príncipe. El titular de la CCA marcó su posición sobre el sistema tributario y reglamentario que afecta al sector durante la cena de fin de año que reunió a unos mil integrantes y referentes del rubro del automotor usado.