Automotores

Rally de las Bodegas: 3 días de esplendor para los pilotos

Coloridas imágenes de otro tiempo. Los autos, bellos, únicos, avanzaban por los caminos mendocinos. Valles, montañas, álamos y viñedos se sucedían a medida que hombres y máquinas devoraban kilómetros. Fueron tres días de pruebas, de competencia, de camaradería. Tres jornadas para recorrer 700 kilómetros al pie de los Andes, siempre majestuosos.

Como cada año, el Rally de las Bodegas, que es organizado por el Club Mendoza Clásicos & Sport y se desarrolla siempre después de la Fiesta de la Vendimia, convocó a pilotos argentinos y extranjeros a participar de la competencia. Como cada año, las tripulaciones visitan varias bodegas, donde se desarrollan algunas de las pruebas especiales. Este tipo de competencia no es de velocidad, sino de regularidad, con promedios inferiores a 50 km/h.

De acuerdo a La Nación, básicamente, pilotos y copilotos deben demostrar su habilidad conductiva y recorrer los tramos fijados por los organizadores en un tiempo lo más próximo posible al preestablecido. Los pilotos de punta suelen pasar por los puestos de control en apenas centésimas de segundo de diferencia del tiempo ideal. De ese modo, al final de la competencia se proclama ganadora la tripulación que recorrió la totalidad de las pruebas con mayor exactitud. Como suele suceder en estos encuentros hay entre 20 y 30 pilotos que se entrenan todo el año para buscar los primeros puestos, y el resto que si bien intenta hacer las cosas lo mejor posible privilegia el paseo y las charlas en rueda de camaradería por encima del resultado.

El primer día se disputó el Desafío Pulenta Estate. Se trata de un recorrido corto y es por eliminación directa. El circuito se arma en las calles que rodean al Hyatt Park y tuvo un final cerrado entre Juan Tonconogy y el mendocino Alejandro Gómez, que con un tiempo casi perfecto (una milésima respecto del tiempo ideal) se quedó con la prueba y recibió el aplauso del numeroso público que cada año concurre a ver la competencia.

El segundo día del Rally exigía un recorrido mayor. Por la mañana los pilotos debieron correr bajo un oscuro frente de tormenta y una lluvia intensa, lo que afectó especialmente a quienes iban en autos abiertos. Sin embargo, pasado el mediodía, el sol apareció para quedarse hasta el final del rally.

Tal cual es costumbre en los últimos tiempos, dos de los principales animadores del Rally fueron Juan Tonconogy, acompañado por Alberto Tonconogy en un Austin Healey 100/4 1956, y Manuel Eliçabe, con Valeria Beruto como copiloto, en un BMW 328 de 1938. Entre ellos dos estaba el ganador y fue tan cerrada la competencia que Juan Tonconogy, que venía en desventaja, logró acortar la diferencia sobre el final y por sólo 11 puntos se quedó con la Copa Park Hyatt Mendoza 2014.

En el contexto de la prueba también se realizó el Concurso de Elegancia, que consagró ganador al Aston Martin Le Mans Special 1933, de Damián Pozzoli. También fueron galardonados el Mercedes-Benz 300 1960 (Categoría E) de Matías Sielecki, el Jaguar E Type 1962 (Categoría F) del inglés James Bodenham, y la Ferrari Daytona 365 1972 (Categoría G) de Alejandro Oxenford.

A la lista de ganadores se sumaron Manuel Eliçabe-Valeria Beruto (BMW 328 1938) en la Categoría D; en la Categoría F1, Oscar Lemos-Fabián Burgos (Austin Healey 3000 MK II 1962); en la Categoría F2, Alejandro Tait-Carlos Tait (Porsche 911 1970); en la Categoría G, Alejandro Gómez-Alberto Oqui Losantos (Porsche 911 SC 1981); en la Categoría B, Mario Viazzo-Mario Viazzo (h.) (Fiat 1500 Coupé 1967), y mejor binomio extranjero los españoles Daniel Genta y José Maiorano (Fiat 1500 1966)..

Autor: REDACCION

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