En ese sentido, Giorgi sostuvo que “desde marzo de 2010 trabajamos con las terminales y las importadoras buscando un proceso de mayor integración local y de reducción del déficit comercial sectorial”.

Giorgi, Moreno, y el secretario de Industria, Eduardo Bianchi, se reunieron ayer con los representantes de las empresas importadoras de vehículos y de terminales automotrices radicadas en el país, a los que se les explicó la política que rige para el sector.

A su vez, Giorgi “el proceso inversor de la cadena automotriz” y al mismo tiempo “las herramientas de financiamiento en condiciones altamente competitivas y la ayuda que brindó el Estado a las empresas del sector, en medio de la peor crisis financiera internacional de los últimos 80 años que castigó con particular dureza a las automotrices del mundo”.

Las importaciones que se realicen a partir de ahora podrán compensarse con exportaciones realizadas hasta el 31 de marzo de 2012 o con la alternativa de un aporte irrevocable de capital durante 2011 a la propia firma importadora, por la cantidad importada.

La compensación debe hacerse con exportaciones de la firma importadora o a través de una empresa del mismo grupo.

Las automotrices deberán comprometer sus planes de exportación mediante una declaración jurada.

Los planes de importación y exportación pueden presentarse a partir de mañana y el Ministerio de Industria aprobará los mismos en un plazo máximo de tres días hábiles.

El año pasado, el ministerio de Industria ya había comunicado a las automotrices que importan vehículos extrazona que debían tender a equilibrar su balanza comercial con la realización de programas de exportación de materiales y piezas producidos en el país.

Participaron de la reunión representantes de CIDOA, Mercedes Benz, BMW, Renault VW Fiat, Hyundai Motor Argentina, Alfacar S.A (Mitsubishi), Chrysler Argentina, Isuzu, Chery, Kia, Centro Milano S.A (Alfa Romeo), Ditecar S.A (Jaguar, Volvo, Land Rover) e Indumotora Argentina S.A (Subaru).

A la Ministra la acompañaron el jefe de Gabinete del Ministerio, Horacio Cepeda, y la asesora Andrea Bovris. (Telam)

Macri, preocupado

El precandidato a presidente pone el grito en el cielo por la restricción de las importaciones. Es que su empresa familiar Chery-Socma no puede traer autos a la Argentina.

En los últimos días el Jefe de Gobierno porteño no pierde ocasión para criticar duro la política nacional de restringir algunas importaciones como medida proteccionista. En su paso por Expoagro y el carnaval de Gualeguaychú, Mauricio mostró su fastidio en cuanta oportunidad se le presentó, y de paso  aprovechó para cuestionar al secretario del Comercio Interior, Guillermo Moreno.

Parece que la preocupación de Macri no es sólo porque esta política va a contrapelo de su doctrina que rinde culto "al Dios mercado", sino que afecta a sus intereses privados y familiares. Este es el mismo empresario que en los ’90 nos estafó a todos los argentinos vendiendo el Fiat Duna a precios europeos, cuando lo fabricaba a la vuelta de su casa con chapa, tela y plásticos subsidiado por el Estado. Y como premio por tanta "venta", Cavallo y Menem le regalaron el “Correo Argentino” para que “compita” con Yabrán. Este es el mismo señor, fiel reflejo de su padre, que vivió colgado de las faldas del Estado toda la vida empresaria que lleva, pero declama ante la opinión pública, sobre las bondades de la libertad económica.

Actualmente su desvelo se trata de la automotriz Chery-Socma que la familia tiene con socios chinos en Uruguay. La firma se quejó en estos días de las trabas al ingreso de sus productos a Argentina. Afirman que llevan más de 60 días de espera para que les autoricen ingresos al país.

Pese a que en varios medios se lo menciona a Franco Macri como el titular de la empresa, consultada por el tema la legisladora porteña y autora del libro El Pibe, Gabriela Cerrutti, dijo que "en 2009 Franco renunció a Socma y transfirió la firma a sus cuatro hijos; es decir que Mauricio tiene el 25%".

La queja que plantea la empresa responde a la reglamentación para la aplicación de la autorización de las licencias no automáticas que dispuso este Gobierno. Ya que la empresa de los Macri no ha sido habilitada.

En defensa de la industria nacional, el Gobierno puso en vigencia las Licencias No Automáticas para monitorear el ingreso de diversos productos al país. La medida, se informó en esa oportunidad, está destinada a proteger 1 millón de puestos de trabajo en el país.