BUENOS AIRES, 28 (NA). - Las automotrices que fabrican autos en la Argentina o los importan deberán declarar hasta enero ante el Gobierno los valores de emisiones de dióxido de carbono de las unidades y el consumo de combustible. Así lo dispuso el ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, a través de la Resolución 797-E/2017 publicada este jueves en el Boletín Oficial, en la que dio tiempo a las empresas hasta el 15 de enero próximo.
El requerimiento es para los fabricantes e importadores de vehículos automotores livianos pertenecientes a las categorías M1 (que no contenga más de 8 asientos más el del conductor) y N1 (utilizados para transporte de carga y con un peso máximo de hasta 3.500 kilos).
Las automotrices deberán declarar ante la Unidad Técnico Operativa de Emisiones Vehiculares dependiente de la cartera que conduce Bergman sobre todos los modelos en comercialización dentro del territorio nacional que cuenten con Certificado de Aprobación de Emisiones Gaseosas vigente, los valores de emisiones de dióxido de carbono y consumo de combustible.
Esas declaraciones deberán ser realizadas conforme al procedimiento de ensayo basado en ciclo europeo admitido para homologación, control de la producción o informe interno de investigación y desarrollo, dice la Resolución. Los valores que declaren las compañías comercializadoras de autos serán solamente a modo informativo y en carácter de declaración jurada, por tal motivo carentes de cualquier tipo de certificación por terceras partes.
Bergman asegura en la norma que la eficiencia energética, minimizando el impacto sobre el ambiente, optimizando la conservación de la energía y la reducción de los costos, conforma en el país un componente imprescindible de la política energética y de la preservación del medio ambiente.
Además, recuerda el ministro, que la Argentina ratificó en 2016 el Acuerdo de París, comprometiéndose a reforzar la respuesta mundial frente a la amenaza del cambio climático global para mantener el aumento de la temperatura media mundial por debajo de 2°C en relación a los niveles preindustriales.