Números diferentes
Las variaciones inflacionarias son tan diferentes como caprichosas, de acuerdo en los lugares que se registre, o mejor dicho, según la óptica que se implemente en la recolección de datos. Aunque, en definitiva, todo tenga su explicación, que es lo que intentaremos hacer luego de conocerse el dato oficial de la inflación en la provincia de Santa Fe, tomada por el IPEC (Instituto Provincial de Estadísticas y Censos), que fijó el alza del costo de vida de 2010 en el 23,1%, bastante más del doble del 10,9% del INDEC a nivel nacional, aunque bastante por debajo del 31% que para Rafaela estableció la consultora Develar.
Vayamos por partes, pues todo tiene explicación, no es el caso de pensar que estamos viviendo en diferentes países, aunque si lo vemos con cierta imaginación algo de eso puede en realidad ocurrir, pues uno es el país de la realidad, el otro de la ficción. Tal vez no valga la pena entrar en mucho detalle sobre lo que viene haciendo el INDEC desde enero de 2007 en que fue intervenido por Guillermo Moreno, manipulando los índices para mostrar una inflación totalmente constreñida, que poco y nada tiene que ver con la realidad cotidiana. Y si no, veamos los propios gremios identificados con el Gobierno, que al momento de negociar ajustes salariales, desechan los informes del INDEC y acuden a los propios o de consultoras privadas, reclamando subas salariales que en algunos casos llegan al 35%, pero que nunca son menores del 20%, con lo cual queda bien en claro cuál es el nivel inflacionario.
En cuanto a los 31 puntos de la consultora rafaelina Develar para todo el año pasado, recordemos -y así se deja en claro cada vez que se hacen las publicaciones- que la misma toma 280 artículos alimenticios y de limpieza, siendo concretamente un relevamiento específico de esos rubros, en los cuales no ingresan otras áreas como vestimenta, educación, salud, transporte, esparcimiento, en fin, lo que necesita una familia para vivir con nivel digno. Es por lo tanto que tiene amplia coincidencia con la realidad, pues en general todos -menos el INDEC- coinciden en que el mayor impacto inflacionario se registró en los alimentos, de ahí el 31% local, que es similar al resto de las mediciones, las que en su caso -y por la amplitud de otros rubros como los mencionados- tienen un efecto hacia abajo.
Ahora, respecto al índice provincial del IPEC, que fue el más reciente difundido, quedó fijado en el 23,1% para todo el año, una vez que se contabilizó el 1,8% de diciembre. Si bien se encuentra más moderado con relación a otras consultoras de orden privado, las que oscilan desde 25 puntos hacia arriba, igualmente tiene una gran diferencia con su simil oficial nacional del INDEC, que estuvo en menos de la mitad con el poco menos que insostenible 10,9%.
El cuadro inflacionario de nuestra Provincia, el cual fue publicado por este Diario, aún con las diferencias que ya quedan expresadas, ofrece también algún margen para el optimismo, tal vez como para ir pensando en que la inflación podría ingresar en un amesetamiento, aun cuando ello se parezca más a una expresión de deseos que a la realidad. Es que según ese gráfico que expone la curvatura inflacionaria santafesina a lo largo de los 12 meses de 2010, tenemos que la alta inflación del comienzo de año se fue desactivando con el correr de los meses, aún mostrando preocupantes altibajos.
Veamos por ejemplo, el verano pasado registró 2,4 puntos en enero y 3,6 en febrero -siendo este el pico más alto- para luego comenzar un descenso que aunque no todo lo vertiginoso que se desearía, fue bajante al fin. Marzo había descendido a 2,3 y luego abril a 2,1 para llegarse a mayo con un más razonable 1,6 puntos y sólo 1 punto en junio, justo a mitad de año. Julio volvió a mostrar un leve crecimiento con 1,2 al igual que agosto, pero en septiembre se tuvo la marca más baja del año con 0,9% siendo la única vez que se estuvo por debajo del dígito. Octubre fue realmente preocupante pues costó la tendencia bajista con un 2,9, aunque en noviembre otra vez en bajante con 2,1 y ahora diciembre, como decimos, con 1,8% que totalizó de tal manera los 23,1% de todo el ciclo.
No existen razones para poner en duda las estadísticas del IPEC santafesino, que dejan vislumbrar una perspectiva muy comprometida, ya que la Argentina de este tiempo se encuentra entre los cinco países con mayor nivel inflacionario del mundo. Y eso es decididamente negativo.