Suplemento Economía

Nuevo sistema para el desarrollo inmobiliario

La capitalización a través de los ladrillos es una de las alternativas de inversión que se mantiene firme desde hace muchos años en la Argentina impulsada, en gran medida, por una demanda sostenida y también por la inflación que obliga a desprenderse de los pesos como forma de preservar el valor del ahorro. Los inmuebles constituyen una inversión que normalmente se aprecia en el tiempo, son capaces de generar renta y en general, tienen un valor relativamente estable con caídas menos bruscas que otras inversiones.

Si bien existen diferentes formas para la adquisición de bienes inmuebles, quizás la denominada “compra al pozo” es la que más se popularizó en la última década. Pero ahora también comienzan a ejecutarse proyectos bajo un nuevo sistema en el que la principal ventaja radica en que, cuando un comprador pagó el valor total de un departamento antes del inicio de la construcción, ya no deberá desembolsar ni un peso más.

Ancla Soluciones Inmobiliarias, una empresa constructora de Rafaela dedicada al diseño, desarrollo, ejecución y comercialización de bienes inmuebles destinados a la inversión inmobiliaria y/o a vivienda propia, comenzó a materializar proyectos bajo este formato que "funciona muy bien", según asegura Fabiana Losano, profesional asesora de la firma. 

"Todo lo que se compra al pozo no tiene un precio cerrado porque durante la ejecución de la obra puede haber actualizaciones por mano de obra o reajuste de materiales. En cambio, con el sistema de Ancla se pacta un precio y una vez que se paga el comprador ya no deberá pagar un centavo más. Esta es la diferencia básica entre ambos modalidades", explicó Losano junto al Gerente de la compañía, Diego Labrecciosa.  

Hoy en día, comprar una vivienda antes de que comience a construirse puede ser una decisión arriesgada en un contexto inflacionario como el de la Argentina y con los costos de la construcción que varían diariamente. Al describir el sistema de compra al pozo, Losano señaló que "una alternativa es que los costos que se encuentran cerrados se mantengan, como por ejemplo el del terreno, los honorarios de los profesionales y otros gastos pactados con anticipación mientras que los gastos que no se pueden predeterminar y acordarse de ante mano se trasladan al comprador reajustándose el precio a medida que vayan variando, por lo cual el inversor debe decidir si prefiere comprar una unidad terminada al contado o si le conviene apostar a largo plazo". En este sentido, agregó que "el porcentaje que se vaya a determinar como fijo y el que corresponda a costo variable dependerá de la empresa y del tipo de proyecto, de acuerdo a la estructura de costos". Al respecto, Losano indicó que "el tipo de obra es clave para definir cómo será la estructura de pago, una opción sería 50% fijo y un 50% determinable, por lo que si durante el transcurso del proyecto surgen incrementos en los valores de los insumos, materiales o mano de obra, estos quedarán sujetos al pago de importes adicionales por parte del particular que lleve adelante la operación".

Ancla Soluciones Inmobiliarias implementó un formato distinto y ahora vende sus propiedades a un precio fijo acordado con el comprador, lo que permite al inversor a no arriesgar su bolsillo a un costo incierto y variable como sucede con la mayoría de las inversiones en nuestro país. "Nuestros clientes, compran en forma directa a la empresa, ya que la misma, adquiere sus terrenos y construye, lo que da como resultado un precio fijo de cada unidad vendida", señaló Losano. 

Y rápidamente ofreció un ejemplo para dejar bien claro cómo funciona este sistema. "Tenemos un departamento en el edificio que proyectamos construir en calle Ayacucho a 78.000 dólares en base a la cotización oficial, que ahora podemos definir en 8,15 pesos. Entonces el interesado entrega 635 mil pesos y después no tiene que pagar un peso más. En el caso de que se opte por un pago financiado, que tenemos en 18 cuotas por transcurso de obra aunque existe la cuota queda en valor dólar y cada vez que se paga se multiplica por la cotización del día del dólar oficial", ilustró. 

Para marcar aún más las diferencias entre ambos sistemas, Losano apeló a otro ejemplo. "Estamos por iniciar la construcción de un complejo de 8 unidades en la esquina de Saavedra y 26 de Enero. Pero ya hay 6 departamentos vendidos. En diciembre valían 70 mil dólares, con una cotización de 5 pesos. Los compradores pagaron 350 mil pesos. Pero hoy ese departamento está valuado en más de 550 mil pesos. Los que compraron no deben poner un centavo más. Nosotros no cobramos la diferencia, pero en el formato de compra al pozo sí se cobra. Esta es la gran ventaja que ofrecemos", enfatizó. 

Por último, Labrecciosa destacó que "hoy contamos con una importante cartera de clientes que deposita su confianza en los proyectos desarrollados por nuestra empresa, ya que los mismos sobresalen por sus excelentes materiales, diseño, acabados, y cumplimiento en los tiempos de entrega, asegurando a sus clientes su inversión". Así, Ancla Soluciones Inmobiliarias "se encuentra en una etapa de consolidación y afianzamiento en el mercado rafaelino, con una trayectoria sólida que se convierte en nuestro principal respaldo".

Además, destacó que "entregamos las propiedades con un año de garantía de obra, ofrecemos financiación de hasta 60 cuotas fijas mediante un convenio con Banco Credicoop, escrituración automática tras la entrega de la llave del departamento y no cobramos la comisión inmobiliaria". 

Autor: REDACCION

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