A los 70 años, murió la figura del soul Bobby Womack, informó el sello por el que editó su último disco, XL Recordings. La causa de su muerte todavía no se conoce. En los últimos años había sufrido varios problemas de salud: tenía cáncer de colon y atravesaba los primeros síntomas del Mal de Alzheimer.

Womack nació en 1944 en Cleveland y creció en una familia muy religiosa. Sus primeros pasos en la música fueron con el sonido gospel. Después, con su hermano armó el grupo The Valentinos. Tras la muerte de Sam Cooke, pionero de la música soul, ellos se separaron.

Luego, colaboró como guitarrista y autor con colegas de renombre como The Rolling Stones y Aretha Franklin, entre otros. En ese período rehizo su primer single, "Lookin' for a Love" y a finales de los años 70 siguió trabajando con otros artistas, como en "(No Matter How High I Get) I'll Still Be Looking Up to You" con Wilton Felder.

A mediados de la década del 80, su carrera se vio afectada por el abuso de sustancias y tras editar algunos trabajos en los 90, en los últimos años su nombre volvió a estar en los primeros planos: Damon Albarn lo convocó para cantar en "Stylo", canción que formó parte del último disco de la banda Gorillaz, Plastic Beach.