Muerte de Bin Laden

La noticia en realidad fue sorprendente, pues luego de tantos esfuerzos que se hicieron durante casi diez años sin éxito, resultaba inesperado que cayera el terrorista más buscado del mundo: Osama Bin Laden. Sin embargo, el anuncio desde la Casa Blanca, a cargo del mismo presidente Barack Obama, justamente por la investidura del transmisor de la novedad, despeja las dudas que podían llegar a existir. Aunque, de todos modos, y formulada la salvedad, se mantiene una cierta incertidumbre, considerando que se trataba de algo tan trascendente y aleccionador, ya que ese era el objetivo buscado aún más que el propio castigo, que lo menos que se esperaba era que su cadáver se exhibiera al mundo entero, tal como ocurrió cuando se aprehendió y luego ejecutó al dictador iraquí Saddam Hussein.

No fue así esta vez, ya que aún informándose que al cadáver de Bin Laden se le hizo un estudio de ADN con restos de una hermana que había fallecido en los Estados Unidos tras la afectación de cáncer, luego de resolvió arrojarlo al mar, resultando una decisión poco comprensible, considerando las sospechas que se generarían en torno a la veracidad del episodio.

El operativo se realizó en Abottabad, una pequeña población en el norte de Pakistán, apenas a unos 60 kilómetros de la capital Islamabad, lo cual llama a pensar sobre la posibilidad de que el gobierno de ese país estuviese al tanto de la presencia del líder de Al Qaeda en el lugar, por lo cual existiría una abierta connivencia con las acciones terroristas que lleva adelante, recordándose por otra parte que las últimas noticias que se tuvieron del mismo daban cuenta de su posible asentamiento en la región montañosa y más árida de Afganistán, pero por cierto contaba con muchas posibilidades de desplazamiento en toda esa conflictiva parte de Medio Oriente.

Bin Laden fue señalado desde siempre como el responsable del ataque a las torres gemelas en Nueva York, un episodio que conmocionó al mundo entero el 11 de septiembre de 2001, próximo a cumplirse una década. Desde entonces, Bin Laden y los cabecillas de su organización terrorista, fueron celosamente buscados aunque sin resultados, llegándose a prácticamente "barrer" con bombardeos toda la zona montañosa afgana.

Según cuentan las crónicas sobre este hecho, la inteligencia estadounidense venía siguiendo el rastro de Bin Laden desde agosto del año pasado, logrando ubicarlo en Pakistán, siendo planificado cuidadosamente el operativo de ataque llevado adelante el domingo, con suma meticulosidad para evitar víctimas civiles, siendo llevado a cabo por un pequeño grupo de élite de las fuerzas estadounidenses. Dicen que en el mismo hubo sólo cinco víctimas, entre ellas el propio Bin Laden, dos hombres cercanos suyos que actuarían como correos, otro que se especulaba podía ser uno de sus hijos mayores, y una mujer que fue utilizada como escudo por los terroristas.

En realidad, y más allá de estos detalles, luego de la eliminación de Bin Laden, no es que la organización terrorista desaparezca, ya que las mismas suelen estar preparadas de tal manera para tener líneas de sucesión automática en el mando, incluso algunas veces sin conocerse entre ellos mismos, para evitar delaciones e infiltraciones. De ser así, como se piensa, Al Qaeda estaría en condiciones de activarse rápidamente para responder a la muerte de su líder, lo que es muy posible que se produzca. Estados Unidos en tanto ha alertado en su nivel máximo de prevención a todo el país y sus principales objetivos, como así también a sus sedes diplomáticas y todo aquello que tenga directa conexión estadounidense, aún siendo compañías de exclusivo interés comercial. Ese aviso de alerta es hasta el 1 de agosto, ignorándose las razones de ese plazo.

Laden había nacido en 1957 en Riad, la capital de Arabia Saudita, y tenía 52 hermanos de varios matrimonios de su padre, siendo una familia que tenía lazos con la monarquía, profesaba la religión musulmana, y disponía de una sólida posición económica. Su educación la cumplió en la escuela secular de élite Al-Thager, teniendo una formación muy rígida y disciplinada, graduándose con posterioridad en administración de empresas. Tras la muerte de su padre, siendo aún muy joven, Osama recibió como parte de su herencia con empresas constructoras establecidas en Sudán, donde comenzó su radicalización, formando un pequeño ejército guerrillero, instalándose en las montañas y combatiendo contra las tropas soviéticas en plena época de la "guerra fría". ¿Quien prestaba ayuda a Bin Laden? pues nada menos que Estados Unidos, el mismo que ahora produjo su eliminación. Al menos, así lo aseguran.