LORCA, 13 (AFP-NA). - Los servicios de emergencias instalaban ayer con medios de campaña a miles de personas que durmieron al raso en Lorca (sureste) tras un sismo que causó nueve muertos y 130 heridos, mientras limpiaban el manto de escombros que cubre las calles.

Las nueve víctimas (una de ellas menor), tras la muerte por una herida grave, son cinco hombres y cuatro mujeres, según las autoridades, que estiman que la cifra no aumentará porque no ha habido avisos de desapariciones. De los 130 heridos, tres están graves, según el gobierno regional.

Por su parte, "entre 10.000 y 15.000" personas que pasaron la noche al raso en parques, plazas y aparcamientos de la ciudad por miedo a réplicas y a desprendimientos en sus domicilios, se organizaban para pasar otra noche fuera de casa, mientras las escuelas permanecían cerradas.

Un sismo de magnitud 5,1 fue registrado a las 18H47 locales (16H47 GMT) del miércoles, horas después de un primer temblor de magnitud 4,4 que se produjo a las 17H05 locales (15H05 GMT) en el mismo lugar, según el servicio sismológico español, que añadió que desde entonces se han registrado 28 movimientos en la zona.