En lo que va de esta segunda década del siglo XXI, los índices de la economía global han mostrado mejoría, especialmente por la tracción que en tal sentido han proporcionado los países emergentes de Africa, Asia y América Latina, que incluso han logrado contrarrestar la deficiente performance de los países desarrollados de Europa, además de Estados Unidos y Japón, que vienen en declive.

Como la expansión está dándose en aquellos países donde la pobreza se encuentra en mayor medida, es entonces que aún dentro de las condiciones mencionadas, justamente se ha ido dando una fuerte disminución de la pobreza. Veamos algunos antecedentes, en 1980 el 52% de la población mundial vivía bajo la línea de pobreza -con ingresos de 1,25 dólar por día- mientras que en 2008 ese porcentaje había descendido a 22%.

Tan espectacular disminución está sostenida especialmente por lo sucedido en varios países asiáticos, ya que allí en 1980 el 77% del total de la población de 3.600 millones de personas vivía con 1,25 dólar por día encontrándose por lo tanto en situación de pobreza, cuando ahora ese porcentaje se contrajo al 12%. En la China por ejemplo en los últimos 30 años fueron 663 millones de personas las que salieron de situación de pobreza, pasando a incorporarse a la clase media, siendo la pobreza en la actualidad el 13% de la población cuando tres décadas atrás constituía el 84%.

Esta espectacular caída de la pobreza es algo que viene afianzándose en todos los países emergentes en estos últimos años, pudiéndose mencionar que son 80 los países de esas características que han sobrepasado la línea de crecimiento de los Estados Unidos, la mayor potencia económica del mundo.

De acuerdo con algunas proyecciones que se han hecho sobre el tema, en 1930 la población mundial estaría en los 8.300 millones de personas, cuando muy probablemente la clase media lograría un total de 4.900 millones, cuando en este momento está conformada por 1.800 millones de personas. Y de acuerdo a los cálculos esa explosión sería un 85% responsabilidad de los países emergentes.

China está marcando el rumbo en esta explosión de crecimiento de la clase media, ya que en 1930 el 75% del total de su población -la más numerosa del mundo- se pasaría a esa nueva condición. Pero claro que existen otros indicadores, como que más del 65% de los 600 millones de habitantes de Africa subsahariana hoy cuentan con telefonía móvil, un dato que da cuenta que aún continuando en la pobreza han dejado de estar en la marginación pues están dentro del mundo tecnológico. Indonesia, con sus archipiélagos de centenares de islas y una población de 240 millones de habitantes, cuenta con 220 millones de teléfonos móviles, lo cual ha permitido que exista un interconexión con todas las redes informáticas y de servicios, propias del mundo actual.

La utilización de Facebook es otro dato que da cuenta de la forma en que hoy está dándose esta clase de difusión de las redes sociales, pues los cinco primeros sitios están ocupados por Brasil, India, Indonesia, México y Estados Unidos en ese orden.

Según lo puntualiza el analista internacional Jorge Castro, desarrollando este tema del crecimiento de la economía mundial en los países emergentes y la consecuente reducción de la pobreza, "el consumo anual de los países emergentes alcanzaría en 2025 a los 30 billones de dólares. Para entonces, 3/5 partes de los 1.000 millones de hogares que tendrían ingresos por 20.000 millones de dólares anuales estarán  en el sur y en el este del planeta (Asia, Africa y América Latina)".

Pero si importante es la participación de la gente de estos países en la adaptación y uso de la tecnología, aún más lo es en el mercado del trabajo, ya que era del 25% en 2001, alcanzando 42% en 2011, en tanto que de acuerdo a las proyecciones que se cuenta en tal sentido se ubicaría en 55% en 2017, con lo cual se llega a la conclusión que el "factor clase media" es algo que excede los límites demográficos o sociales para ubicarse como un elemento importante dentro de la productividad. Puede mencionarse por ejemplo que en la última década son 19 los países emergentes que duplicaron el ingreso per cápita de sus habitantes, beneficiando a 2.600 millones de personas, correspondiendo 8 de ese total al Africa subsahariana, que siempre ha sido una de las regiones más postergadas del planeta.

En este caso, la realidad está superando algunas perspectivas pesimistas, dejando entrever que aún con inconvenientes el mundo va superándose.