Internacionales

Libia: opositores a Kadhafi toman el este

EL CAIRO, 24 (AFP-NA). - El líder libio Muamar Kadhafi se hallaba ayer asediado por una rebelión que controlaba el este del país, mientras continuaban las protestas antigubernamentales en el Golfo y el rey de Arabia Saudita anunciaba miles de millones de dólares para mejorar la vida de sus súbditos.

Pese a las amenazas lanzadas el lunes por Kadhafi de aplastar las protestas, la insurrección parecía controlar alrededor de un tercio del país, en el este.

Periodistas de la AFP desplazados al lugar vieron a rebeldes -en su mayoría armados- en la carretera cercana a la costa mediterránea que va desde la frontera con Egipto hasta la ciudad de Tobruk, unos 150 km más al oeste.

Por todas partes se veían insurgentes enarbolando la bandera de la independencia de 1951, anterior al régimen de Kadhafi.

El viceministro libio de Relaciones Exteriores, Jaled Kaim, afirmó ayer durante una reunión con embajadores de los países de la Unión Europea que Al Qaida estableció un emirato islámico en la zona de Derna (este), gobernado por un ex detenido de Guantánamo.

El régimen de Kadhafi, en el poder desde hace 42 años, vive un movimiento de contestación sin precedentes desde el 15 de febrero y cuya represión causó 300 muertos (242 civiles y 58 militares), según las autoridades libias, y 640 según las cifras dadas ayer por la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH).

La Unión Europea estudia imponer sanciones al régimen libio.


EL GOLFO,

CONVULSIONADO

En el Golfo, los manifestantes seguían movilizados ayer en Bahréin para pedir reformas a la monarquía sunita a pesar de la liberación de 23 opositores chiitas.

En Manama, en la Plaza de la Perla, convertida en el epicentro de la revuelta, los manifestantes, en su mayoría chiitas, seguían gritando consignas contra la dinastía sunita de los Al Jalifa.

Tras los disturbios del martes, las fuerzas de seguridad dejaron el centro de la ciudad y no había ningún policía visible ayer, un signo de la voluntad de apaciguamiento de las autoridades con la oposición.

El rey Hamad ben Isa Al Jalifa viajó ayer a Arabia Saudita, donde el rey Abdalá anunció, con motivo de su regreso al país tras tres meses de ausencia por enfermedad, una serie de medidas sociales por valor de miles de millones de dólares que beneficiarán sobre todo a funcionarios, estudiantes y obtención de créditos y amnistió a todos los condenados por delitos financieros.

Este regreso fue interpretado por la prensa saudita y por expertos internacionales como un gesto del monarca en favor de la estabilidad en la región.

La muerte de dos manifestantes en Yemen, en un ataque de partidarios del presidente Alí Abdalá Saleh contra una sentada en Saná ocurrido el martes por la noche, reforzó todavía más la determinación de los opositores al régimen, que ayer seguían movilizados en la capital del país, con miles de personas participando en una nueva protesta delante de la universidad de Saná.

El Congreso General del Pueblo (CGP), el partido en el poder, aplazó una contramanifestación prevista para ayer a causa de la muerte de los dos manifestantes en la noche del martes, mientras que ocho diputados del partido dimitieron para protestar contra la violenta represión de la oposición. En total 16 personas han muerto en el país desde que empezó el movimiento de protesta, según fuentes médicas.

En Jordania, la oposición anunció la celebración el viernes de un "día de la ira" en Ammán para "denunciar las violencias y reclamar reformas".

En Marruecos, algunas asociaciones anunciaron la continuación de "la movilización para reivindicar medidas políticas urgentes".

En Argelia, la oposición volvió a manifestar sus divergencias con el poder, que continúa tratando de reconquistar a la opinión pública con medidas en favor de la economía, el empleo y la vivienda y el anuncio del levantamiento del estado de emergencia.


EL PETROLEO

SE DISPARA

Como consecuencia de la situación en el mundo árabe, el precio del petróleo superó los 110 dólares por barril de Brent en Londres, algo que no sucedía desde septiembre de 2008.

En Libia, miembro de la OPEP y cuarto productor africano de crudo, todos los puertos y terminales se encuentran cerrados por lo que es imposible exportar hidrocarburos, anunció ayer la compañía marítima francesa CMA-CGM.

La otra salida para exportar el petróleo y el gas libio es el gasoducto Greenstream, que une Libia con Italia, pero el suministro está cortado desde el martes, según el grupo energético italiano ENI.

Autor: Redacción

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web