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La rafaelina que egresó como bailarina del Colón, y triunfa en una obra ganadora de Premios Hugo

Por Fiorella Martina

Evangelina Dulce tiene 19 años y reside en Buenos Aires hace ya bastante tiempo. A los 13, en plena entrada a la adolescencia, decidió mudar su vida a otra provincia para ser lo que siempre deseó: una bailarina. Antes, se preparó arduamente con profesores intachables de la ciudad, quienes la guiaron y le mostraron cuál era el camino. Así, logró ingresar al Instituto Superior de Arte del Teatro Colón, primero como becaria, y luego como alumna definitiva.
En la actualidad ya es graduada, terminó felizmente el recorrido que incluye hasta octavo año. Desde un principio supo que su vida sería diferente, y con su corta edad, aceptó lo que eso conllevaría. Su esfuerzo y su perseverancia dieron frutos: tuvo la oportunidad de participar en diversos espectáculos de renombre y de bailar sobre el imponente escenario del Teatro Colón. Hoy brilla en la obra “Este no es un cuento silvestre”, que se lleva a cabo en el Centro de Experimentación de dicho teatro, y que cuenta con guión y dirección del gran Emiliano Dionisi.
El protagonista de esta fábula es un adolescente porteño que debe mudarse a Misiones por orden de su mamá. Pese a que pone mil ‘peros’ y se niega más de una vez, no le queda otra opción que acceder a ello. En ese traslado, Silvestre cambia de piel y de vida, se transforma su mirada de las cosas que antes concebía como naturales y cotidianas. La selva misionera, los animales salvajes, la naturaleza y los obstáculos convierten la vida de Silvestre en una vorágine.
Tomás Castiglione es quien personifica a la perfección a este adolescente perdido y desorientado. De forma magnífica, en un monólogo, presta su voz para su personaje y también para todos los otros que lo rodean, es decir, se encarga de narrar la historia. Su gestualidad y su cambio constante de agudos y graves para asumir los discursos ajenos hacen que la dinámica se comprenda de principio a fin y que no caiga en confusiones. Él es la voz de su maestra, sus compañeros nuevos de la escuela, su madre y más.
Esta obra tuvo su estreno en las vacaciones de invierno y, debido a su éxito, reestrenó hace unas semanas. Las entradas se vendieron inmediatamente para todas las fechas programadas, lo que habla de una muy buena respuesta por parte del público. Muchos confían en el trabajo de Emiliano Dionisi, que siempre sorprende, y muchos otros también apuestan al trabajo del equipo artístico, que está conformado por el Ensamble Barroco y alumnos de Danza y Canto de la Especialización en Ópera Barroca del Instituto Superior de Arte del Teatro Colón.  
Asimismo, la sala del CETC es un ambiente íntimo, perfecto para la historia que se cuenta. La escenografía, por otra parte, emula ese espesor de la selva en donde todo sucede. El vestuario cuenta con varios cambios, pensados hasta el último detalle para que no solo sean algo más, sino que colaboren con la historia y den a conocer la identidad de quienes los llevan puestos. Además, se utilizan máscaras para representar a los animales, máscaras hechas de forma artesanal que terminan siendo una extensión de sus cuerpos.
La aventura, el adentrarse hacia lo desconocido para descubrirse a uno mismo, la decisión de animarse pese al miedo que puede suponer el contacto con animales salvajes y que parecen, al menos para Silvestre, de otro planeta, son también uno de los grandes atractivos de la obra. La moraleja, en este caso, llega al corazón de todos de forma sutil y sentida. Invita a reflexionar sobre la identidad propia y colectiva, sobre las transformaciones y la aceptación. Esta obra, orientada a un público infantil y para toda la familia, resuena en los niños de forma especial, ya que todos disfrutan, por momentos se sorprenden y se emocionan, al igual que los adultos.
No por nada fue merecedora de tres Premios Hugo: Mejor musical infantil o juvenil, Mejor dirección en musical infantil o juvenil para su director, Emiliano Dionisi, y Mejor libro en musical infantil o juvenil. Además, fue nominada a los Premios Ace 2023 como Mejor espectáculo infantil.
En diálogo con LA OPINIÓN, Evangelina comenta detalles de la obra y de su experiencia.

¿Cómo surgió la propuesta?

La propuesta surgió por un programa que ya estaba planteado desde principio de año para las vacaciones de invierno, en el que se iban a llevar a cabo dos obras infantiles en el Centro de Experimentación del Teatro Colón, en el primer subsuelo. Se iban a convocar a alumnos de las tres diferentes carreras que integran el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón: música, canto y danza. Margarita Fernández es la coreógrafa de la obra, y fue mi maestra todo este año. Un día estaba en una clase y me apartó para contarme un poco sobre el tema, que se iba a hacer una obra en vacaciones de invierno, me contó cómo se llamaba, quién la iba a dirigir, y me dijo que le encantaría que yo esté. Yo le dije que sí porque para mí era una oportunidad súper linda. Ser una de las elegidas fue un honor. 

¿Qué fue lo que te atrajo?

Lo que me atrajo en un principio fue que era un proyecto diferente a lo que yo estaba acostumbrada a hacer, que era participar de obras clásicas, subirme a un escenario convencional, por así decirlo, porque no hay contacto con el público, los movimientos son totalmente diferentes. Esto combinaba la actuación y la danza, sí tenías contacto con el público, tenías que romper la cuarta pared, dialogar, gesticular, atrapar. Era otro espacio y realmente eso fue lo que me atrapó. Cuando me interioricé en el libreto, en la trama, cuando tuvimos nuestra primera reunión con los cantantes, con el actor, con el director, eso me terminó de fascinar.

¿Cómo fue el trabajo con el equipo y con el director?
Trabajar con el equipo y con Emi de director fue un proceso hermoso y muy fructífero para mí como artista porque aprendí un montón de cosas, sobre todo de Emiliano, de sus correcciones, de la manera en la que teníamos que interactuar entre nosotros, cómo meternos en el personaje, pero también observando y analizando las escenas a mis compañeros. Teníamos una dinámica muy linda de grupo y congeniamos muy bien todos. Fue un proceso muy hermoso y así mismo con el montaje de la coreografía también, con Margarita y con mis compañeros. Así que eso fue algo nuevo para mí, pero que realmente me encantaba.

¿Supuso un desafío para vos como bailarina?
Sí podría decir que fue un desafío como bailarina y como intérprete, porque si bien los movimientos de la coreografía y la técnica ya eran pasos que yo tenía incorporados en mi cuerpo y me salían bien, tenía que combinarlos con lip sync, que es el movimiento de los labios simulando que estás diciendo un diálogo. En muchas escenas de la obra yo tenía que hacer eso, pero no quieta. Lo tenía que decir mientras estaba saltando, girando, haciendo una pirueta o levantando la pierna. No podía salirme del personaje. Además de que eran cambios de ropa muy rápidos, porque yo tenía que interpretar en la misma obra a cuatro personajes. De mono a psicopedagoga y de psicopedagoga a alumna. También me quedé con la idea de adaptarme a la música con la orquesta en vivo.

¿Qué es lo que te llevás de la obra?
Haber trabajado en esta obra fue algo inolvidable para mí. No solo me sirvió y me aportó algo artístico para mi carrera, como experiencia profesional, como bailarina, como intérprete, sino que también me permitió llevarme un grupo hermoso de gente. Todo el equipo se fusionó muy bien, tanto con mis compañeros, que me llevo en el alma, porque pude acercarme más a ellos, con la gente nueva que conocí, con los cantantes, con las chicas de caracterización, con las chicas de vestuario, con Emiliano, con los asistentes de dirección. Las risas no faltaron, la alegría, el amor por el arte, el trabajo en equipo, el ayudarnos entre nosotros. Agradezco a la vida esta oportunidad. 

"Este no es un cuento silvestre" tiene sus últimas funciones este fin de semana, y ya hay muchos que esperan nuevas fechas el año que viene. LA OPINIÓN continúa destacando artistas de la ciudad que cumplen sus sueños y se animan a hacer de esos sueños, su vida.    

Autor: REDACCION

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