Por Fiorella Martina
Este fin de semana, LA OPINIÓN estuvo presente en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.
Luego de años de incertidumbre por la pandemia de Covid-19 y un regreso en el 2022 con una 'nueva normalidad', este 2023 fue como volver a los mejores momentos de la Feria.
A lo largo de más de 15 días, la Feria logró reunir a una multitud que paseó por el predio de La Rural. Dividida en sus clásicos pabellones de colores verde, azul, rojo, amarillo, blanco y ocre, los stands de las editoriales, librerías y distribuidoras se repartían a lo largo del predio.
Muchos se detenían a ver y rever el mapa que brindaban en las oficinas de información para no dar vueltas en círculos, algo muy común de este tipo de ferias; en esa enormidad, varios se pierden y retoman el camino hacia donde desean ir.
Atentos a las novedades, la cadena de librerías Cúspide y las editoriales como Random House y Planeta se llevaron la mayor cantidad de público. Salían con bolsas llenas y aprovechaban los descuentos con bancos específicos.
Por otro lado, las editoriales independientes notaron una alza en sus ventas y dieron a conocer también su catálogo.
Muchos otros optaron por las ofertas, descuentos para estudiantes y docentes, y 2x1 que se ofrecían en algunos stands; precios desde 600 hasta 3000 pesos por libros que, fuera de la feria, costaban más del doble. Las oportunidades para comprar en cantidad y a buen costo estaban allí; podían conseguirse títulos clásicos y 'joyitas' como suelen llamarse a los libros relativamente nuevos, de autores contemporáneos.
Para quienes deseaban un descanso, había carribares con diferentes opciones gastronómicas y lugares para sentarse al aire libre.
Cabe destacar la presencia de turistas que eligieron nuevamente la ciudad de Buenos Aires, y aprovecharon este evento para pasar gran parte de su tiempo.
Ayer, la Feria concluyó sus jornadas con talleres para las infancias, un homenaje a María Kodama, un panel sobre modelo agropecuario y medio ambiente, lecturas transfeministas y presentaciones de libros, entre otras actividades.
EL STAND DE LA PROVINCIA
Con su azul llamativo, el stand de la provincia estaba ubicado en un lugar estratégico, a la vista de todos. La amabilidad de quienes atendían al público, hizo que no solo sea un espacio de visibilidad y ventas, sino también un espacio de encuentro. La presencia de libros de autores rafaelinos como Santiago Alassia y Franco Rosso fue de gran gratitud para este medio que felicita la participación de los escritores locales a nivel nacional.
Además, hubo festejos por el Día de Santa Fe con la presencia del Coro Polifónico y la presentación del libro del diputado nacional Roberto Mirabella.
LA FERIA EN NÚMEROS
Según datos de la organización, 1.245.000 visitantes recorrieron los 41.590 metros cuadrados de exposición de la Feria, que contó con la presencia de 486 expositores y 1483 sellos editoriales; la realización de 2137 actividades culturales; y la visita de más de 200 autores internacionales.
Además, participaron más de 1000 bibliotecas populares de toda la Argentina en una nueva edición del Programa Libro % de la Conabip, y, durante las llamadas "jornadas profesionales" asistieron más de 12 mil representantes de la industria del libro.