Sociales

La mirada de Juan Carlos Ceja acerca de la gira por los barrios

El grupo de teatro Alas viene llevando a cabo presentaciones en distintos sitios de la ciudad, para interiorizarnos acerca de la marcha de esta propuesta, dialogamos con el director del grupo, Juan Carlos Ceja, un rafaelino que, combinó su tarea como docente y la pasión por el teatro, logrando sobresalir en ambas actividades, a continuación las respuestas.
¿Qué respuesta están teniendo en la gira barrial?
La gira contempla la visita a cinco barrios y la propuesta puede concretarse por la disposición de los vecinalistas para que las funciones se realicen en los salones barriales y por la colaboración del Gobierno Municipal como se ha dado en otras oportunidades.
Hasta el momento hicimos una función, fue en el barrio Independencia y la próxima será en el Ilolay, luego siguen las de junio, así que no es posible todavía hacer una evaluación porque estamos en la largada.
El público de la primera función nos dio un aplauso largo y altamente sonoro, como es costumbre en los barrios al final entra en conversación con los integrantes del grupo durante un rato largo potenciando así el rito de modo entrañable.
La respuesta acerca de la cantidad de público no está entre los criterios más importantes a tener en cuenta por Alas cuando decide llevar sus trabajos a los barrios, ahí nos impulsa el logro de resultados cualitativos más que cuantitativos.
¿Qué diferencia podés marcar entre el público del centro y el de los barrios?
En relación a esta pregunta y con respeto digo que el denominado público del centro en realidad se compone con personas de los distintos barrios pero, reconocemos que hay barrios donde sus vecinos no concurren al teatro o lo hacen de manera muy esporádica mientras otras personas lo realizan con frecuencia o sistemáticamente y provienen en gran parte de determinados barrios y sectores sociales.
De todas maneras el sentido del interrogante es claro; no quisiera entrar en interpretaciones que no resulten claras o sean tildadas de tendenciosas pero, para mí cualquier público es respetable porque al asistir a ver una obra artística se da a sí mismo una oportunidad de formación y disfrute y por añadidura propicia el sostenimiento de la producción artística; cualquiera fuese el público debe ser bien considerado porque en última instancia es pasador de cultura.
Frente al hecho artístico cada público o persona hace lecturas e interpretaciones diversas desde marcos referenciales particulares, los suyos y todos deben ser bienvenidos si es que estamos trabajando por una sociedad más democrática, inclusiva, diversa y amigable.
¿Cómo reciben el tema de la obra?
La aguda mirada de Florencio Sánchez en sus obras urbanas se extiende sobre la clase media y sus recurrentes problemas alrededor de la institución familiar y la lucha por el ascenso social. En "Los derechos de la salud", plantea el drama de los enfermos, quiénes durante años encadenan a los sanos a su destino.
La obra es densa en el tratamiento del conflicto, el dolor y el desenlace ineludiblemente trágico y posibilita hacer relaciones con la realidad a la que nos arrojó la pandemia de Covid.
La obra tuvo y va recibiendo aceptación a pesar del argumento, incluso algunas personas nos manifestaron que veían bien que nos animáramos con un tema que nos conecta con nuestro propio tiempo, al respecto recordamos que la obra se estrenó en momentos que reinaban los protocolos sanitarios.
¿Creés que debiera propiciarse más este tipo de presentaciones?
En lo personal creo que sí; de la política oficial de aquí y de allá no voy a decir nada pero, debiese ser un objetivo más de los grupos independientes en general, para no abundar te contesto con una pretendida metáfora. Nosotros, si esto fuera un partido, creemos saber dónde está el arco.


Autor: REDACCION

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