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La industria santafesina acumula una caída del 5,3% en el primer semestre

A medida que avanza el año, el panorama se oscurece para la industria de la provincia de Santa Fe que soporta tres golpes de magnitud: la sequía, la inflación y las restricciones a las importaciones impuestas por el Gobierno nacional a partir de la escasez de dólares. 
El último informe de la Federación Industrial de Santa Fe (FISFE) es concluyente: en junio el nivel de producción manufacturera registró en la Provincia una caída de 9,7 por ciento interanual y de esa manera acumula en el primer semestre del año un retroceso de 5,3% respecto al mismo período del año pasado.
Según el último Informe de Actualidad Industrial del Instituto de Investigaciones Económicas de la FISFE disponible, los principales factores que impactaron sobre la industria provincial fueron:
• las restricciones a las importaciones con los consecuentes inconvenientes en la provisión de insumos;
• el proceso inflacionario que altera los costos relativos, degrada los salarios (y por ende cae el poder adquisitivo en el mercado interno) y reduce la competitividad del tipo de cambio exportador;
• la sequía que afectó a las industrias vinculadas directa o indirectamente con el sector agropecuario, ya sea por la menores ventas de sus productos como así también por la reducida provisión de materias primas.
"Como factor adicional, es necesario remarcar que la escasez de divisas y las tensiones en el marco de la renegociación de la deuda externa derivan en una creciente inestabilidad a nivel macroeconómico con implicancias negativas directas sobre la actividad y los costos", expresó el documento.
En su análisis de situación, la FISFE consideró que "el nivel de actividad industrial en Santa Fe prolongó durante junio su reciente coyuntura negativa explicada en buena parte por el efecto negativo de la grave sequía, que desde fines de 2022 y hasta el presente afecta a importantes sectores agroindustriales desarrollados fuertemente en la Provincia, como la molienda de oleaginosas y lácteos al interior de la industria alimenticia; remolques y maquinaria agrícola en el complejo metalúrgico; y agroquímicos y biodiesel en la industria química".
En el detalle sobre el desempeño de cada una de las ramas de actividad, se destacaron con una contribución positiva al producto industrial santafesino vehículos automotores (+43,9%), molienda de cereales (+12,6%), carne vacuna (+9,5%), maquinaria de uso general (+9,4%), prendas de vestir (+6,2%), productos de metal y servicios de trabajo en metales (+4,8%) y papel y productos de papel (+0,4%). En contrapartida, arrojaron un saldo negativo manufacturas de plástico (-1,6%), productos metálicos para uso estructural (-3,4%), edición e impresión (-3,8%), productos lácteos (-3,9%), muebles y colchones (-4,3%), maquinaria de uso especial (-5,1%), fiambres y embutidos (-6,5%), autopartes (-8,3%), carrocerías y remolques (-11,6%), maquinaria agropecuaria (-13,2%), molienda de oleaginosas (-22,9%) e Industria siderúrgica (-24,9%). "En el segundo trimestre prácticamente la mitad de los sectores mostraron menor actividad respecto de 2022", remarca.
De todos modos, hay casos raros que morigeran la caída. La producción de automóviles en Santa Fe evidenció en junio de 2023 un significativo crecimiento de 43,8% interanual, y una suba de 44,1% en la medición acumulada en los seis primeros meses del año. "El nivel de actividad sectorial registra en nuestra provincia dieciséis meses consecutivos de expansión interanual, que se fundamenta en una mayor demanda externa e interna", sostiene el documento.
En cuanto a la industria metalúrgica, uno de los sectores más fuertes de Rafaela y la región, en la provincia de Santa Fe presentó una caída de 8,6% interanual en junio último. A su interior se verificaron los siguientes resultados: fundición (+7,2%); productos metálicos p/uso estructural (-3,4%); otros productos de metal y servicios de trabajo (+4,8%); maquinaria de uso general (+9,4%); maquinaria agropecuaria (-13,2%); maquinaria de uso especial (-5,1%); aparatos de uso doméstico (-2,7%); equipos y aparatos eléctricos (-6,3%); carrocerías y remolques (-11,6%); autopartes (-8,3%), y motocicletas (+3,5%).
Con respecto a los indicadores energéticos, señala que "la demanda de energía eléctrica por parte de un importante grupo de grandes usuarios industriales con actividad en la provincia de Santa Fe presentó en junio de 2023, y por quinto mes consecutivo, una caída de 11,5% en relación al mismo mes del año anterior".
El resultado es pésimo en materia de comercio exterior: "Al finalizar el primer semestre de 2023 las exportaciones argentinas y de la provincia de Santa Fe muestran un importante deterioro respecto del año anterior". En este sentido, las colocaciones externas -medidas en cantidad- de bienes argentinos "cayeron un 17,9%, mientras que las originadas en nuestra provincia retrocedieron un 41,1% en relación al mismo período de 2022". "Este resultado se reitera en los principales grandes rubros de exportación. Las ventas externas de productos primarios disminuyeron un 41% en el orden nacional, y un 65,4% las de Santa Fe, revelando la mayor severidad de la sequía", consigna el trabajo.
En tanto, las exportaciones de manufacturas de origen agropecuario retrocedieron un 17,9% y un 27,0% en nuestro país y Santa Fe respectivamente. Por su parte, las ventas externas de manufacturas de origen industrial, disminuyeron un 66,6% en la Provincia -especialmente por la baja en biodiesel-, mientras que en el orden nacional la merma fue de tan solo un 2,2%.
El reporte concluye con un dato alarmante, al precisar que el valor de las exportaciones argentinas descendió en seis meses 10.870 millones de dólares, de los cuales más de 3.800 millones de dólares se explican por las menores colocaciones externas de Santa Fe. En pocos días se conocerán los datos de julio sobre la industria santafesina. No hay señales para ser optimistas. 

Autor: REDACCION

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