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La cruda realidad del turismo en Rafaela

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Crédito: EN DESCENSO. Son cada vez menos los turistas que visitan la ciudad.

La Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) del INDEC mide el impacto del turismo internacional y del turismo interno sobre el sector hotelero y parahotelero nacional. Gracias a los datos que nos brinda podemos hacer un análisis de la situación en nuestra ciudad.
En el año 2007, el total de viajeros hospedados en Rafaela fue de 102.407, esta cifra ha ido en descenso desde entonces, con algunas evoluciones positivas en algunos años. Por ejemplo, en el año 2018 tuvimos 92.192 turistas, y al año siguiente sufrió una disminución del 37,41%, alcanzando solo los 57.707 viajeros en el año. Luego con la llegada de la pandemia, el año 2020 nos arroja una cifra que refleja la cruda realidad de ese entonces, 9203 personas se alojaron en los establecimientos hoteleros y/o parahoteleros de la ciudad. Por otra parte, 2021 no fue para nada alentador, los datos arrojados hasta octubre, inclusive, de ese año da cuenta de que solo 6430, en todo el año, fueron los visitantes que durmieron al menos una noche en nuestra ciudad.
Con respecto a la cantidad de días de estadía media anual, el promedio en 2008 era de 1,5 cifra que fue disminuyendo y durante 7 años (de 2011 a 2017) se mantuvo en 1,2. En 2018, tuvo un importante incremento y alcanzó 1,8. Los siguientes años no se informaron.
Las plazas disponibles en el año 2007 eran 30.251, las cuales correspondían a 13 establecimientos (hoteleros y parahoteleros) y, la ocupación de plazas (porcentaje anual) fue del 42,12%, cifra que ha mantenido una tendencia en baja. En 2018, hay una importante mejoría, dando cuenta que había, en ese entonces, 28.549 plazas disponibles (10 establecimientos en total) y la ocupación promedio anual de plazas fue de 49,49%. Para 2019, disminuye la ocupación de plazas un 45,95%, llegando por tanto a solo el 26,75% de ocupación; las plazas disponibles eran 26566 las cuales correspondían a 10 establecimientos. En 2020 la ocupación fue solo del 1,33% (19.500 plazas disponibles de 5 establecimientos) y en 2021 (datos hasta octubre, inclusive, de ese año) fue de 5,56%, las plazas disponibles fueron 20.875 correspondientes a 7 establecimientos.
La baja de los últimos años da cuenta de cómo la pandemia afectó la actividad, no se realizaron los grandes eventos convocantes de la ciudad y tampoco se pudieron realizar eventos sociales de particulares.
Sobre la baja de la cantidad de turistas en la ciudad, Silvina Imperiale, Presidente CAPHREBAR, manifestó: “La merma de ocupación hotelera se debe fundamentalmente a las nuevas modalidades de trabajo, más allá de la pandemia, eran modalidades de trabajo que ya estaban en curso pero que el tema de la pandemia acelero y que hoy llegaron para quedarse. Antes los viajantes venían y estaban una semana, ahora solo vienen unos días cada varios meses solo a visitar a sus clientes. Otro de los factores fundamentales que explican esos datos son las distintas formas de contratación donde la gente en lugar de contratar un cuarto de hotel contrata un departamento “regulado por nadie”, consume hospedaje irregular, lo que muchas veces ocasiona mucho malestar con los turistas, ya que se encuentran con instalaciones deplorables que no condicen con lo que creían estar contratando”.
Asimismo, agregó: “En nuestra ciudad, esa clase de hospedaje no está regulada, en muy pocas lo está. Por lo tanto, en caso de algún inconveniente, los consumidores no tienen donde plantear su queja o su problema porque se trata de un contrato entre particulares.”
Con respecto a cómo el sector sobrellevó la pandemia y el panorama actual, Silvina Imperiale, expresó: “En la pandemia, el sector pudo sostenerse con la asistencia del Estado nacional a través del ATP y después convertido en el sistema REPRO, y una asistencia a nivel provincial, nos dieron $10.000 por cada empleado durante un plazo de 6 meses en el rubro hotelería y de 3 meses en gastronomía. Al principio fue necesario utilizar los ahorros y después se siguió a fuerza de deuda que todavía al día de hoy se continúa pagando. Contraer deudas es rápido y fácil, pero luego pagar lleva tiempo para acomodar los tantos. Ahora la actividad está encontrando su punto de inflexión y llegando una mediana normalidad y hay que pagar las obligaciones corrientes y achicar todas las deudas que se generaron".


Autor: REDACCION

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