SUPLEMENTO RURAL

La Chicharrita sigue ausente en las principales regiones maiceras

La buena noticia del mes la trajo el 7° informe de la Red Nacional de Monitoreo Dalbulus maidis, el cual abarca a 426 distritos productivos y que tiene datos actualizados entre el 22 de octubre y el 8 de noviembre. Allí se afirma que casi el 90% del área cultivable con el cereal, “sigue mostrando presencia nula de la plaga”.

Incluso, en zona núcleo (provincias de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires, el 95% de los casos no arrojó novedades de preocupación.

Si bien se aclara que “en algunos puntos aislados de zonas endémicas, se detectaron focos”, están dentro de los estándares normales de la región y la época del año, por lo que se recomienda “implementar un manejo cuanto antes para evitar que prosperen”.

La directora del laboratorio de Entomología y Protección Vegetal del INTA Oliveros, Ing. Evangelina Perotti, afirmó que los maíces implantados como “de primera siembra” en zona central ya se encuentran en estado de V7 y V8, y por lo tanto ya escaparon al período de susceptibilidad; es muy probable que algún productor, con estos cambios climáticos que se están dando, se anime a sembrar los maíces tardíos en diciembre”.

EL RELEVAMIENTO NACIONAL

En las regiones Centro Norte y Centro Sur del país, cerca del 95% de las localidades también registraron presencia nula de este insecto, incluso en lugares donde ya hay maíz implantado. En las pocas localidades de estas regiones donde se ha detectado la plaga, esta tuvo una magnitud muy baja, que no superó los dos insectos por trampa.

La foto sigue siendo buena en regiones endémicas, como el NOA, el NEA y el Litoral, aunque menos pareja. En algunas localidades de estas regiones han aparecido focos, y si bien son puntuales y aislados, resulta importante actuar cuanto antes para evitar que el vector prolifere.

Cabe destacar que esos sitios donde se ha detectado un incremento de Dalbulus maidis “son lugares que han tenido maíces voluntarios o guachos ya en agosto, porque hoy se encuentran arriba del nivel fenológico V6”, explicó Alejandro Vera, investigador de la Sección Zoología Agrícola de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC).

En esos focos “hay que adoptar medidas para que la plaga no se dispare”, entre las que se destaca la eliminación del maíz guacho, para evitar que estos insectos se reproduzcan, y, en caso de ser necesario, incorporar alguna alternativa para su control, indicó Vera.

“La situación que tenemos en el Norte es muy distinta a la que teníamos el año pasado en los meses de septiembre y de octubre. Los valores hoy son muy bajos con respecto a 2023, si bien se sabe que en esta zona el Dalbulus maidis es endémico y está a lo largo de todo el año”, resaltó Augusto Casmuz, investigador de la EEAOC.

Por otro lado, los recientes aumentos de temperaturas multiplicaron la aparición de cicadélidos, por lo que no todas las chicharritas son de la especie Dalbulus maidis, que es la que transmite el complejo de patógenos del “achaparramiento del maíz”. Por ello, los expertos recomiendan que, en caso de duda, se realice la identificación taxonómica del vector con un entomólogo, para evitar sobreestimaciones de la plaga.

COMENTARIOS REGIÓN CENTRO NORTE

En la Región Centro Norte de las 75 localidades relevadas, en cerca un 95% no se registró presencia del vector (71 localidades). Aquellas que tuvieron captura de D. maidis, correspondieron a la categoría de 1 a 4 adultos de D. maidis/trampa. En aquellos lotes donde hay maíz implantado es recomendable el monitoreo frecuente de los mismos, para la detección temprana de la plaga. En lotes con antecesor maíz, se deberá monitorear para detectar y controlar en tiempo y forma los maíces voluntarios, minimizando el desarrollo de este vector y del complejo de patógenos causantes del achaparramiento del maíz.

ACERCA DE LA RED

La Red Nacional de Monitoreo Dalbulus maidis surgió en 2024, en respuesta al problema del complejo del achaparramiento del maíz transmitido por esta plaga, que afectó gran parte de la superficie maicera de la Argentina. Coordinada por la Asociación Maíz y Sorgo Argentino (Maizar), participan en ella instituciones claves del sector agropecuario argentino, como la Asociación Argentina de Protección Profesional de Cultivos Extensivos (AAPPCE), la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC).

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web