Editorial

La caída de exportaciones

Lejos quedó el año 2011 cuando las exportaciones argentinas superaron los 84 mil millones de dólares, una cifra récord que a juzgar por la evolución de las ventas externas del país quedará por un tiempo en ese sitial. La caída de los precios internacionales de los commodities agropecuarios que habían generado el "viento de cola" y los problemas de la macroeconomía en el plano interno explican en gran medida el cambio de tendencia en materia de comercio exterior en la Argentina.

Si bien en el 2002 el país había registrado exportaciones por 26 mil millones de dólares, por lo que el récord de 2011 permite realizar en términos cuantitativos al menos un balance muy positivo. En tanto, en el 2012 las ventas externas treparon a 81.205 millones de dólares, en 2013 se ubicaron en 81.000 millones y en 2014 la caída fue más pronunciada al descender a 72.000 mil millones. Para peor, la devaluación del real y la apreciación del dólar a nivel mundial junto a la desaceleración de China y la baja de los precios de las commodities no pintan un buen panorama para Argentina en este 2015. 

El Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) había destacado en uno de sus habituales reportes analíticos que una estrategia de inserción internacional sustentable, que logre un equilibrio entre materias primas, alimentos, industria y servicios, requería generar mejoras de competitividad en los sectores manufactureros. El retraso cambiario y el aumento de los costos a partir de un escenario inflacionario fueron en sentido contrario, empujando a los exportadores en una situación difícil con pérdida de rentabilidad y con mayores obstáculos para cumplir con los contratos (el cepo a las importaciones sumó trabas adicionales a su operatoria). 

En este contexto, se comprende porque el saldo de la balanza comercial arrojó en junio un superávit de apenas 456 millones de dólares y registró una caída del 57% respecto de igual mes del 2014, según datos oficiales del INDEC. El saldo de los primeros seis meses del año llega a los 1.232 millones de dólares, un 62,9% inferior a los 3.326 millones de igual período de un año atrás.

En junio las exportaciones cayeron 14% y las importaciones 7%, según el informe oficial, lo que confirma la tendencia a la baja del comercio exterior en la Argentina. Las exportaciones llegaron en junio último a 6.266 millones de dólares, menos que los 7.288 millones de igual mes del año anterior, y fueron en la serie de la tendencia-ciclo, las más bajas desde marzo del 2010, mientras que las importaciones alcanzaron los 5.810 millones por debajo de los 6.224 millones, efectuando la misma comparación.

En el primer semestre de este año las exportaciones reflejan una caída del 18% en forma interanual y las importaciones un 13%, contra igual período del año pasado. El total de las exportaciones en el primer semestre del año llegan a 30.213 millones contra 36.820 millones de un año atrás, lo que representa algo más del 15 por ciento. En tanto, entre enero y junio pasado las importaciones totalizaron 28.981 millones de dólares, contra 33.494 del mismo período del 2014. 

Otro dato que no es menor en este análisis es que en los últimos cuatro años, un 40 por ciento de las PyMEs exportadoras perdieron nivel de ventas o directamente dejaron de venderle al mundo, según un informe de la consultora especializada abece. Así, de un total de 9.295 pequeñas y medianas empresas exportadoras (pymex) existentes, 3.027 resignaron su categoría y 1.176 dejaron de exportar, en el periodo 2010-2014, lo que implica una disminución del 40% del total inicial. Solamente 5.092 mantuvieron su nivel, según el informe de la consultora que encabeza el economista Dante Sica, mientras que a las grandes exportadoras les ocurrió lo contrario. Entre las grandes compañías, un 77% de las verificadas en 2010 aún mantiene su categoría de exportadora y aumentaron de 1.165 a 1.360 compañías.

Los especialistas coinciden en que exportaciones diversificadas y de alto valor agregado son aún una asignatura pendiente para la Argentina. El Instituto Argentino de Análisis Fiscal destacó que entre otros beneficios, las exportaciones contribuyen a alcanzar el equilibrio de las cuentas externas e internas, al crecimiento de la economía de la mano de la innovación y la eficiencia productiva, y a la creación de un entorno competitivo en los mercados domésticos. Sin embargo, señaló que "pese a esta convicción, la economía argentina viene protagonizando desde el año 2011 un proceso de reducción del valor de sus envíos al exterior". Y que a la vez se advierte un fenómeno basado en una concentración de la canasta de exportables en torno a productos agropecuarios. "Esto enciende una señal de alerta si se tiene en cuenta que los precios internacionales tienden a ser altamente volátiles y que en particular los vinculados al sector agropecuario se encuentran actualmente en una fase descendente", concluyó.




Autor: Redacción

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