en Italia, con la esperanza de ser de nuevo primer ministro, un
año después de ceder el cargo al tecnócrata Mario Monti.
"Entro en escena para ganar", declaró ante la prensa el
Cavaliere, de 76 años, que hace poco más de un mes aseguraba que
no concurriría a los comicios.
del Milan AC, su club de fútbol, Berlusconi pone fin a la
incertidumbre reinante desde hace un mes, y reforzada cuando hace
dos días su partido se abstuvo en dos votaciones muy importantes
para el gobierno Monti.
plano", explicó Berlusconi el miércoles por la noche, afirmando
que quiere salvar a una "Italia al borde del precipicio" y minada
por el desempleo y los impuestos.
Desde noviembre de 2011, el partido Pueblo de la Libertad (PDL)
había apoyado al gobierno de tecnócratas de Mario Monti, en una
alianza obligada e inédita con el centro-izquierda.
año, hemos apoyado este gobierno intentando corregir las medidas
que no nos convencen. Pero también afirmando siempre que una
política de austeridad en una economía que no crece provoca
daños", explicó el que fuera primer ministro durante tres períodos.
"Todas las cifras son peores que hace un año", aseguró
Berlusconi, añadiendo que su partido votará los textos actualmente
examinados en el Parlamento, empezando por la ley presupuestaria,
hasta el final de la legislatura la primavera próxima.
una ala moderada y otra más derechista. Un sondeo reciente del
Instituto SWG le da menos del 14% de los votos en las próximas
legislativas, pese a que en las de 2008 ganó triunfalmente con un 38%.
política y de los mercados financieros para dejar el poder a Mario
Monti.
El viernes, la deuda italiana volvía a estar bajo presión, con
una prima de riesgo en 330 puntos (frente a menos de 300 el
lunes), y la Bolsa de Milán cerró con una pérdida de 0,86%.