Carta de Lectores

Inundaciones, productores y Estado

Sr. Director:


Ante el desastre que una vez más vive nuestra región, creo importante poner en conocimiento de la población, reafirmando los conceptos de la excelente carta publicada por la Sra. Patricia Schätzle Gajdosik y el documento elaborado por un conjunto de sociedades rurales de la región, que hay una clara y contundente responsabilidad del Estado provincial en parte de las consecuencias que hoy estamos volviendo a sufrir en el corazón productivo de nuestra provincia.

Para ello, la ciudadanía en general debe conocer que el productor agropecuario cuya propiedad está incluida en el área de un Comité de Cuenca paga una suma igual o mayor al impuesto Inmobiliario Rural en concepto de tasa. Cada Comité actúa sin coordinación y no todos los distritos están incluidos. Para tener la visualización de esta incoherencia hay que imaginar las consecuencias de drenar una región con trabajos de canalización para que, al llegar al distrito no incluido, el agua no tenga salida cuenca abajo y rebote.

Esta situación se da, por ejemplo, en el Comité de Cuenca de Las Calaveras-Las Penquitas, comité que afecta a un campo de nuestra propiedad. Habiéndose agravado la situación, en junio de 2013 solicité al comité que se revea el problema que nos afectaba, por no estar incluidos en el régimen los distritos linderos. No habiendo recibido ni respuesta ni solución, me dirigí en febrero de 2015 tanto a las autoridades del comité como al Ing. Alberto Mitri, entonces Director Provincial de Drenajes y Retenciones, para avisar que no abonaría más la tasa hasta tanto no tuviera una solución.

¿Cuál es la moraleja? Simple. Los productores están pagando por un servicio que no se da, y que si se da, se da mal, sin coordinación del último responsable que es el Estado. Hacer un drenaje en parte de la cuenca alta y no continuarlo en la cuenca baja en su totalidad, es simplemente un chiste de mal gusto. No se le está regalando nada al productor, porque se le cobra mucho dinero en impuestos y tasas, para que tenga que enfrentar periódicamente el fantasma de su quiebra económica.

De paso, también dejo mi inquietud por el cambio que se quiere producir de autovía a autopista de la ruta 34. Los que supuestamente estuvieron a cargo de su planificación durante más de 10 años y los que ahora proponen el cambio ¿habrán tenido en cuenta el tema agua?

Es tiempo que el Gobierno de la Provincia comience a actuar con coherencia y en forma eficaz, o sea antes de la tragedia, no una vez que ya se produjo. Es RESPONSABILIDAD del Estado coordinar y realizar los trabajos de canalización en TODA la cuenca. Eso incluye involucrarse en el proyecto de la nueva autopista de la Ruta 34. Es muy fácil ser Estado en Argentina: siempre gana. Las pérdidas son del que trabaja y produce.


Lic. Lilián Koper

Rafaela

Autor: Redacción

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