Por Rubén A. Armando
En la mañana de la víspera, en nuestro portal se brindó información, referida a que en Florencio Varela, Buenos Aires, se había registrado el macabro hallazgo del cadáver de un joven, de aproximadamente 20 años de edad, ubicado en una zanja, envuelto en una sábana, y con un trozo de cable en el cuello.
Horas después, se supo que se llamaba Rodrigo Lautaro Javier Aquino, de 22 años, y que su deceso se produjo al ser atacado a golpes y puñaladas, en un suceso donde la PolIcía continuaba buscando al asesino.
En principio, se creyó que el muchacho había muerto estrangulado, pero los exámenes médicos determinaron que había sido producto de una brutal agresión a golpes, y puñaladas.