BUENOS AIRES, 4 (NA). - A menos de una semana de que Daniel Funes de Rioja asuma al frente de la Unión Industrial Argentina (UIA), recibió críticas de parte de un sector de la central fabril, en medio de crecientes tensiones ante la reconfiguración de la cúpula por las elecciones.
Funes de Rioja, titular de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), formalizará su llegada a la presidencia de la UIA el martes próximo, cuando Miguel Acevedo deje su cargo. Hasta las elecciones de este año, ocupaba el cargo de vicepresidente de Asuntos Laborales e internacionales y en tan sólo unos días pasará a presidir la poderosa entidad tras disputarse el puesto con Miguel Ángel Rodríguez, titular de la empresa Sinteplast, quien finalmente ocupará el cargo de secretario.
"Hay cosas que no son claras", advirtió uno de los miembros titulares de la UIA, José Ignacio De Mendiguren, quien consideró "muy raro" que se elija "a un abogado laboralista" como presidente de la entidad que enrola a los industriales.
En declaraciones televisivas, el histórico dirigente ironizó: "Es lo mismo que poner al sepulturero a manejar el quirófano".
"Los laboralistas viven de los juicios. ¿No tenemos un industrial para que conduzca?", cuestionó De Mendiguren -actual presidente del BICE y enrolado en el massismo-, y hasta aseguró que "un abogado no diferencia un bulón de una tuerca".
El rol de las nuevas autoridades industriales será fundamental en la relación con el Gobierno frente a la crisis económica, y en un escenario en el que la administración de Alberto Fernández busca diferentes mecanismos para intentar lograr una recuperación.