El 53% de los profesionales de la industria de la construcción advirtieron que la actividad mostró una fuerte caída en 2023, de acuerdo con una encuesta realizada por la Asociación Civil Opinión Construya.

El relevamiento se llevó a cabo entre el 24 de noviembre y el 11 de diciembre del año pasado y participaron 436 profesionales de la cadena de valor de todo el país.

Según los resultados, más de la mitad de los consultados percibió una baja en su actividad en los últimos 12 meses, mientras que el 34% aseguró que el nivel se mantuvo estable y sólo el 11% indicó que tuvo una mejora en comparación con igual período de 2022.

Entre los factores que los encuestados consideraron clave, se destacan la incertidumbre cambiaria con el 30%, seguida por la menor disponibilidad de financiamiento y el mayor costo de los materiales, ambos con un 15%. A esto le siguió con un 13% la "escasez de mano de obra calificada" y la menor inversión en obras privadas.

Una de las variables mencionadas como “positiva” es la construcción considerada como “refugio de valor”, que se destaca con un sólido 46%.

Las obras privadas nuevas medianas y pequeñas son el segmento que más impulsa la demanda, elegido por el 51% de los encuestados.

En cuanto a las perspectivas futuras, el 46% anticipó que la situación se repetirá en 2024, el 27% espera que el nivel de actividad se mantenga y apenas un 18% prevé una mejora.

Entre los constructores y arquitectos, 41% respondió que espera una caída de su actividad en el próximo año. Por el contrario, las inmobiliarias y los desarrolladores se mostraron más optimistas que el resto de los eslabones de la cadena de valor, señala el informe.