Suplemento Economía

Fronteando en la economía argentina

La inflación del mayo estaría en valores del 5% y con las tarifas de los servicios públicos por ajustarse en el presente junio, nos encaminamos a una suba de precios que superará el 70% anual. Para salir de los números y visualizarlo mejor vayamos por un ejemplo con unas ricas milanesas, si en los primeros días del presente año nos comprábamos 10 milanesas, en diciembre de este 2022, solo podremos comprar 3 con el mismo monto de dinero. En otras palabras la moneda perdió más de dos tercios de su poder adquisitivo.
Ahora, lo que perdió el citado poder de compra es la moneda. ¿Qué pasa con nuestro poder adquisitivo? Para poder tener un parámetro de esto, deberíamos analizar si nuestros ingresos subieron, o no, en la misma proporción en el mismo período de tiempo. En estos primeros cinco meses, la inflación acumulada es del 28.1%, a esta cifra la debemos comparar con el aumento de nuestros ingresos, salarios, jubilaciones, etc., en dicho período. Al final del año, debemos hacer la comparación nuevamente anualizando los valores.
Pero la inflación es un promedio, por lo que podríamos complejizar el análisis y verlo por rubros, alimentos, vestimenta, salud, entre otros que pueden afectar mi economía más que a otros ciudadanos, dependiendo de mi perfil y necesidades. Todo esto, gracias a las tecnologías actuales, está al alcance de la mano y para todos en la página web del Indec.
Esta tremenda situación inflacionaria produce una dispersión de precios y valores que confunde a la sociedad y genera que algunos anuncios de parte del gobierno, se intenten mostrar como logros o conquistas, aunque sean solo medidas populistas y engañosas. Por ejemplo la suba del mínimo no imponible de ganancias, que se recibe con beneplácito por los beneficiados, es solo una recomposición de valores, no una conquista de un sector. Lo mismo con la suba de planes sociales, paritarias por salarios o aumento de jubilaciones y pensiones. Por un lado, desde la conducción económica nacional, generan inflación y por otro, cuando se recomponen los ingresos, manifiestan que es por mérito de su gestión.
El origen de la inflación argentina, tiene su principio en el gasto del Estado, que no alcanza a ser cubierto con los excesivos impuestos que recauda y debe recurrirse a la emisión espurrea para pagarlo, que luego se deviene en suba de todos los precios de la economía. Frente a este inconveniente gravísimo y recurrente, tenemos que escuchar frases como, “de la crisis se sale con más Estado”, y luego obran en consecuencia. Ejemplo de esto último es el plan que conocimos esta semana donde el Gobierno busca incorporar 29.000 empleos públicos nacionales nuevos (un 23% del total), habiendo incorporado el año pasado unos 10.500, en ambos casos bajo el programa “Regularización del Empleo Público”. Siendo que los números oficiales nos indican que más del 80% del gasto se cubre con emisión monetaria o dicho de otra forma la gran presión tributaria argentina solo alcanza para cubrir menos del 20% del tremendo gasto del Estado, aumentarlo para salir de la actual situación es lo mismo que en un barco con su casco con un hoyo por donde ingresa agua, se le haga otro agujero con la expectativa que el agua que ingresa por uno salga por el nuevo.
Si alguien tiene dudas o quiere discutir lo expuesto, le canto con Duki, De la Ghetto y Quevedo: Si quieren frontear libros tengo un montón, ejemplos tengo un montón, apuntes tengo un montón. Si quieren frontear, teoría tengo un montón, experiencia hay un montón, donde el populismo fracasó y el mercado ganó.
#BuenaSaludFinanciera @ElcontadorB @GuilleBriggiler


Autor: Guillermo Briggiler

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