Decididamente faltan viviendas, un común denominador para toda la Argentina que también aquí en Rafaela y en la provincia de Santa Fe encuentra el eco correspondiente, habiéndose puntualizado en numerosas ocasiones que aún con todo lo que se viene haciendo, tanto con el aporte municipal como de la provincia y la nación, aún así hay 3.500 inscriptos en la espera de poder acceder a una vivienda social, dentro del marco de los diferentes planes que se llevan adelante.
La semana anterior, fue el secretario de Estado del Hábitat de la provincia, Diego Leone, quien al visitar esta ciudad con la finalidad de observar el avance de un programa de 64 casas que se vienen construyendo, puntualizó esa necesidad de unidades habitacionales que existe en todos los ámbitos, a la vez que destacó el trabajo mancomunado que se viene realizando entre el gobierno local y el provincial, mientras que con referencia al nacional, si bien hizo hincapié que con la actual administración se había interrumpido el ciclo anterior -durante los últimos 8 años del kirchnerismo- en que no se realizaron aportes de estas características, aunque también sostuvo que se esperaba que fueran financiadas muchísima mayor cantidad de unidades.
"Venimos de ser discriminados durante los últimos ocho años de las gestiones anteriores -dijo Leone respecto al gobierno de Cristina Kirchner-, por lo cual es importante que con este gobierno rompimos la inercia, aunque todavía no tomamos el cuerpo que merece la provincia de Santa Fe", puntualizando que en la extensa geografía santafesina hay más de tres millones de habitantes, con un déficit habitacional muy pronunciado, recordando que hacia fines del presente año se cintará con un registro digital actualizado, pudiéndose asentar la inscripción a través de la página oficial de la provincia santafe.gov.ar/habitat, para luego ingresar en el Registro de Acceso de la Vivienda. Una forma absolutamente transparente y ágil, donde todos aquellos santafesinos que tengan necesidad y posibilidad de una vivienda, queden convenientemente asentados en dicho registro.
En el último año y medio el gobierno provincial lleva entregadas a los adjudicatarios correspondientes 1.500 casas, con otras 2.500 que se encuentran actualmente en ejecución, además de otras varias licitaciones en marcha, estando contemplado que cuando cierre el presente año serán 3.500 las viviendas entregadas.
Con relación a las 64 unidades en construcción, recordemos que 34 de las mismas están ubicadas en un terreno municipal del barrio Barranquitas, en tanto las 30 restantes en un predio del programa "Mi tierra, mi casa", en las que se comenzó a trabajar alrededor de un mes atrás, avanzándose con un ritmo tal que es probable que en dos meses algunas familias de las adjudicatarias ya puedan trasladarse para ocuparlas. En tal sentido, el funcionario Leone dijo que con el municipio de Rafaela "hemos trabajado muy bien y de manera coordinada", puntualizando además el contacto constante que existe con rafaelinos que están necesitados de viviendas.
Otro tema de singular importancia es que se sigue trabajando en un loteo ubicado en la zona sur de la ciudad, donde se pondrán a disposición de los interesados que se ajusten a las condiciones requeridas, nada menos que 600 lotes, que en el futuro se convertirán sin dudas en igual cantidad de viviendas.
Más que la referencia sobre hechos puntuales sobre la construcción de nuevas viviendas que se suman a la ciudad, como así también a que nivel de gobierno corresponden, aquí lo que realmente trasciende y que debe impulsarse, es que a través de cualquier posibilidad que existe estas casas continúen incrementándose, pues los requerimientos son muy elevados, sumando varios miles las personas que integran grupos familiares que no cuentan con otra posibilidad de llegar al techo propio, si no es mediante la intervención del Estado y de los gobiernos en sus tres niveles.
En materia de acciones de gobierno, el construir viviendas es uno de los objetivos primordiales. Ojalá siga la concordancia para que el objetivo a alcanzar sea mucho más sencillo de hacerlo realidad.