Como todos los años el Centro de Docentes Jubilados y Pensionados Provinciales propicia la realización de un acto para recordar al padre del aula y junto a él a todos los maestros, precisamente en la jornada que se celebra el Día del maestro, fecha que fue recordada ayer.
Tal como suele suceder, quienes organizan la realización se congregaron en los alrededores del monumento al gran sanjuanino para aguardar a quienes concurriesen a la ceremonia, en esos instantes, personal técnico del Municipio, que preparaba el equipo de sonido, izó el pabellón nacional, y  fue inmediata la reacción, se produjo un emotivo momento en el que, seguramente, como reflejo de la actividad docente y el recuerdo de lo que se hacía cada mañana en los establecimientos educativos, los presentes, "a cappella", entonaron las bellísimas estrofas de Aurora, y saludaron con un aplauso a la Bandera.
Seguidamente fueron acercándose autoridades del Municipio Jorge Muriel, secretario de Gobierno; Mariana Andereggen, secretaria de Educación; Ana Theller, secretaria de Intendencia; Adrián Oesquer, secretario general de AMSAFE, hicieron lo propio integrantes de la institución organizadora y público en general.
Tras la entonación del Himno Nacional Argentino, Celina Martinoli, Mirta Fontanetto y Miriam Birchner, por el Centro depositaron una ofrenda floral ante el monumento a Domingo Sarmiento, hizo lo propio María Gagliardo, integrante de la Comisión Vecinal del barrio Sarmiento.
Acto seguido fue guardado un minuto de silencio.
A continuación Teresa Rosetti pronunció un mensaje  a través del cual recorrió la rica y extensa trayectoria de Sarmiento, quien además de ser el puntal del hecho educativo, se desempeñó, con brillantez, en diversas y variadas funciones, considerándoselo como el precursor de la sociedad del porvenir, ya que, según se destacó, comprendió que la ciencia era el motor del progreso, y puso énfasis en la creación de escuelas de investigación.
Fue destacado su accionar impulsando una educación pública y de calidad para todos. Fue el creador de las escuelas normales, en este punto la oradora enfatizó el significado y el valor de los maestros normales, cuyos principios les permitieron hacer patria en cada rincón de la Argentina.
Con la entonación del Himno a Sarmiento se le puso fin a la sencilla pero muy significativa ceremonia.