MADRID, 3 (AFP-NA). - El gobierno central de España y los ejecutivos autónomos de las 17 regiones se comprometieron ayer a respetar los objetivos de déficit del país, en un "buen mensaje" destinado a los mercados y a Europa, aunque acordaron revisar en el futuro el reparto entre unos y otros. 

El jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, y los presidentes de las regiones aprobaron por unanimidad una declaración en la que afirman su "compromiso con la Consolidación fiscal", anunció el propio Rajoy.

Madrid se había comprometido a reducir su déficit público a 6,3% del PIB este año (9,44% en 2011, según cifras revisadas), pero tuvo que reconocer el sábado que el dinero público inyectado a los bancos dispara esa cifra hasta el 7,4%.

Aun así, sigue manteniendo sus objetivos de 4,5% para 2013 y 2,8% para 2014.

Muchas de las 17 regiones del país, responsables en gran medida del desvío presupuestario, se oponen a las políticas de austeridad impuestas por Madrid y defienden que el Estado central cargue con una mayor parte del recorte.

Rajoy y los presidente autonómicos decidieron así revisar, a partir de 2014, el reparto de los esfuerzos.

"El objetivo capital es que España como país llegue en su déficit al cumplimiento de nuestros compromisos con la Unión Europea, no me preocupa tanto en este momento la distribución y no tengo inconveniente en que se produzca ese debate de cara a 2014", afirmó Rajoy.

"No era fácil llegar a un entendimiento", reconoció, "pero creo que hoy España da un buen mensaje". "Es bueno para España, es nuestro compromiso con Europa y es bueno de cara a los mercados", agregó.

La situación financiera de las regiones españolas preocupa a los mercados. Cinco de ellas, incluidos pesos pesados como Cataluña, Valencia y Andalucía, tuvieron que recurrir a un fondo de liquidez creado por Madrid y dotado con 18.000 millones de euros.

RAJOY NIEGA 

MADRID, 3 (AFP-NA). - Un rescate de la economía global española no es inminente, aseguró ayer el jefe del gobierno conservador español, Mariano Rajoy, cuyo país se encuentra bajo presión de los mercados y de algunos de sus socios europeos para que pida la ayuda.

"No", se limitó a responder de forma rotunda el presidente del gobierno, al ser preguntado por los periodistas si es inminente un rescate de España, en rueda de prensa al término de una reunión con los presidentes de los gobiernos autónomos de las regiones españolas.