Ford Mustang se lanzó el 17 de abril de 1964 en la Feria Mundial de Nueva York. Aquella primera generación (1964-1973) creó un nuevo tipo de vehículos: los Pony cars. Lee Iacocca, general manager de Ford, pautó ideas claras para crear el Mustang. No quería el mejor deportivo, sino el más barato. Un auto con estética deportiva, pero de mecánica tranquila. Los diseñadores le dieron un modelo que costaba US$ 2368 y el mercado le dedicó un éxito espectacular. En los primeros 18 meses de producción salieron de Dearborn más de un millón de Mustang.

El Mustang II (1974-1978) fue un producto de la crisis del petróleo en los 70. Fueron modelos más pequeños y con motores menos potentes: un 4 cilindros 2.3 88 HP y un V6 2.8 105 HP fueron los iniciales, aunque luego (1977) tuvo un V8 5.0 de modestos 134 HP.

La tercera generación (1979-1993) surge con el chasis Fox. De estos modelos no hubo convertibles hasta 1983, pero contó con motores 4 (alguno con turbo) y 6 en línea, V6 y V8. En 1991 Ford creó la división Special Vehicle Team (SVT) para potenciar modelos. Los Mustang Cobra y Cobra R (con motor V8 5.0 EFI de 235 HP) de 1993 fueron sus primeros trabajos.

Menos longeva fue la cuarta generación (1994-2004), que comenzó con las clásicas versiones coupé y convertible con motores V6 3.8 145 HP, V8 5.0 215 Hp (GT) y V8 5.0 240 HP (Cobra). Tras el rediseño de 1999, el Mustang IV terminó con propulsores V6 193 HP y tres versiones del V8 4.6: 16 válvulas 260 HP (GT), 32v 305 HP (Mach 1) y 32v 390 HP (Cobra).

La quinta generación (2005-2014) mostró nuevas suspensiones y motores capaz de acelerar el Mustang de 0 a 100 km h en 5,1s y los 400 m en 13,5s. En 2011, los motores fueron revisados, quedando al tope el Mustang Shelby GT 500 V8 5.4 Supercharged (con compresor volumétrico) que entregaba 550 HP.ßG.T.