Región

El INTA está en la mira y el sector agropecuario sale en su defensa

INTA. La dirigencia rural respaldó al organismo y criticó duramente las intenciones oficiales.

La diputada Alcira Figueroa (Salta) y su par Martín Caparrós (Tierra del Fuego), presentaron un proyecto de ley que pretende modificar el Consejo Directivo del INTA para reducir la representación y participación del sector agropecuario en ese ámbito. La propuesta, que ha sido elevada a las comisiones de Agricultura, Ganadería y Pesca y Mujeres y Diversidad (las dos a cargo del oficialismo) cayó muy mal en la dirigencia rural, que criticó duramente la idea y salió a respaldar al organismo.

En primer lugar, debe señalarse que la composición del Consejo Directivo del INTA establece un representante por cada una de las cuatro entidades gremiales (SRA. FAA, CRA y CONINAGRO), uno en representación de CREA, dos por las facultades, presidente, vice presidente y representante del Ministerio de Agricultura.

Según se conoció, la iniciativa de la legisladora establece que el Directorio del INTA deberá conformarse por un presidente, una vicepresidenta y seis vocales: un representante del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, uno del SENASA, uno del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, uno del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) y dos en representación de las provincias.

También, propone la creación de un Consejo Asesor conformado por dos representantes de las Facultades, un representante de las cooperativas de productores, un representante de las asociaciones de productores y dos representantes de las organizaciones de agricultores familiares.

Por otra parte, la iniciativa destaca que aquellas personas que integren el Directorio deberán ser argentinas nativas o naturalizadas y poseer título universitario de carreras afines. Además, se pone el foco en la paridad de género, contemplando un cupo de cuatro hombres y cuatro mujeres, con la obligación que presidente y vicepresidente no pertenezcan al mismo género.

Por último, trascendió que el proyecto prohíbe que integren el Consejo, aquellos funcionarios públicos que tuvieren denuncias por violencia de género y/o por actos discriminatorios.


MUNICIÓN GRUESA DE LAS ENTIDADES

La Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias manifestó “su profunda preocupación y rechazo” frente a un proyecto legislativo que busca modificar el funcionamiento del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), teniendo en cuenta que el organismo tiene un rol fundamental en el desarrollo tecnológico del sector.

Según la dirigencia, la iniciativa presentada la semana pasada pretende alterar la composición actual del Consejo Directivo, órgano máximo de conducción, integrado por representantes del sector público y privado que garantiza una activa participación de los productores y profesionales en la fijación de las políticas públicas de investigación, desarrollo y extensionismo sectorial.

“Primero fueron por las tierras, ahora por la conducción”, indicaron en un comunicado haciendo alusión a diversos proyectos de ley impulsados hace unas semanas que pretendían apropiarse de tierras de las estaciones experimentales en distintas provincias. Y concluyeron: “frente a este nuevo intento por avasallar al INTA, solicitamos a los diputados y senadores que no permitan que se vulneren los derechos de las entidades que representamos a los productores agropecuarios”.

En la misma sintonía se expresó la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias de Santa Fe, que rechazó “cualquier intento legislativo que persiga alterar el funcionamiento del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA)”.

Al respecto, la dirigencia santafesina expresó: “estos avasallamientos han sido advertidos y condenados, semanas atrás, cuando rechazamos proyectos de ley que impulsaban la apropiación de tierras de las estaciones experimentales en varias provincias. Estas prácticas, que buscan cercenar el rol fundamental que tiene el INTA, ya se muestran habituales y por eso manifestamos nuestra preocupación y estamos en alerta para defender al organismo integrado por representantes del sector público y privado”.

La férrea defensa de las entidades hacia el organismo tiene una explicación: fue y es la herramienta fundamental para el desarrollo tecnológico del sector. Durante más de 60 años, el INTA ha conseguido un prestigio en el país y el mundo, por los aportes trascendentales que ha realizado al sistema productivo. Por eso, la iniciativa de la diputada Figueroa generó controversia y preocupación, teniendo en cuenta que para muchos la “jugada” es un ataque más hacia las instituciones y el sector.

Autor: REDACCION

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