Editorial

El embarazo adolescente

En un estudio elaborado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas que tuvo como objetivo analizar el impacto económico de las maternidades tempranas en la Argentina, se concluyó que el embarazo en la adolescencia genera costos anuales de 31.626 millones de pesos. 

Los gastos de salud relacionados con la atención de embarazo, parto y puerperio adolescente por año relevados por el análisis del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) alcanzaron los 90.667 pesos por cada una de las 874.715 madres tempranas que hubo en Argentina entre 2017 y 2018. El análisis también aportó que anualmente las madres menores de 18 años tienen una perdida social estimada en 21.512 millones de pesos, ya que sus oportunidades laborales disminuyen y son menores comparadas a las mujeres madres adultas. Las adolescentes que son mamás permanecen más en el hogar dedicadas a tareas domésticas y a cuidados y resultan afectadas por la inactividad laboral un 25% más que las madres mayores de 19 años, explicó Julia Frenkel, una de las autoras del informe. Además incorporó el costo para el Estado por la falta de recaudación de impuestos, que se estimó en 2.517.372.468 pesos.

De acuerdo al informe, con la prevención adecuada de estos embarazos, el sector público sanitario se ahorraría cada año 5.318 millones de pesos, dato que surge de considerar que 7 de cada 10 embarazadas madres de entre 15 y 19 años no son intencionales. entonces el Estado podría ahorrar al menos 70% de sus gastos en atención. En relación a la educación, las mujeres que fueron madres adolescentes tienen menor probabilidad de terminar el secundario; sólo el 3% alcanzó un nivel terciario y únicamente el 1% logró un título universitario.

El estudio fue elaborado en el marco del proyecto de cooperación de UNFPA con el Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia (ENIA) que dirige Silvina Ramos en Argentina, y se utilizó la Metodología para Estimar el Impacto Económico del Embarazo y la Maternidad (Milena). La metodología se basa en comparar las trayectorias de las mujeres que fueron madres con 19 años o menos , con quienes lo fueron después de los 20 años.

Las estadísticas de la UNFPA, un organismo que por estos días tiene como consigna "contribuir a un mundo donde cada embarazo sea deseado, cada parto sea sin riesgos y cada persona joven alcance su pleno desarrollo", advierten que  Latinoamérica y el Caribe es la segunda región mundial con mayor proporción de nacimientos de madres adolescentes.  En la Argentina, según aclara, el 16% de los nacimientos que se registran cada año proviene de madres adolescentes de entre 15 y 19 años (en algunas provincias equivale al 25%) en tanto que más de 3000 son de niñas de 10 a 13 años. Otro dato contundente es que el 69% de esas mujeres adolescentes no planearon ese embarazo.

El análisis subraya que la gran mayoría de los embarazos adolescentes ocurre porque los chicos desconocen cómo funciona su propio cuerpo, o por haber escuchado mitos falsos sobre la sexualidad y las formas de cuidarse. El debut sexual ocurre casi siempre en la adolescencia y en este marco, 4 de cada 10 madres adolescentes se quedaron embarazadas en su primera vez. Ante estas circunstancias que causan un giro en la vida de las chicas, es necesario plantear que el alto número de embarazos no planeados en la adolescencia aumenta el riesgo de exposición a un aborto inseguro, de abandono escolar y de limitaciones de acceso al mercado laboral, apunta el informe. En este escenario, los adolescentes tienen derecho a recibir información clara, atención médica y métodos anticonceptivos de forma gratuita en centros de salud y hospitales públicos de todo el país. 

El ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, que asistió al acto de la presentación del informe de la UNFPA en Buenos Aires, dijo que "estos datos van a servir para ver y cambiar el impacto del embarazo adolescente y trabajar desde el Ministerio para que ocurra menos, sobre todo, donde más ocurre". "Este es un insumo para que las chicas tengan la posibilidad de decidir sobre sus cuerpos y sus vidas", resaltó a su turno Mariana Isasi, oficial de Enlace de UNFPA Argentina, al presentar el documentos junto a la titular de la dirección de Salud Sexual y Reproductiva, Valeria Islas. "Si se lograran prevenir los embarazos adolescentes en el país se ganaría en su conjunto, cada año, alrededor de 800 millones de dólares que podrían mejorar la competitividad del país y favorecer un desarrollo sostenido e inclusión social", destacó Federico Tobar, asesor regional en Insumos de Salud Reproductiva del organismo de Naciones Unidas.

Asimismo, el especialista reseñó que con esos recursos se podrían construir, en cada municipio del país, un hogar de protección integral para víctimas de violencia de género; brindar 850 mil becas a estudiantes universitarios y garantizar en forma integral los costos de formar a casi 3.000 profesionales universitarios.









Autor: REDACCION

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web